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“Este es el camino”, fotografía de Ángel
Barreiro, finalista del concurso de
fotografía Eolo 2015.
n PINCELADAS DE SENSACIONES AL COMPÁS n LA HORA DEL VIENTO. Antonio Alegret Anguita
DEL VIENTO. Andaba ajeno a mi necesidad de energía, ya que la obtengo
Juan Antonio Pérez López siempre que quiero, cuando las señales acústicas añadieron
Escucho el constante sonido de las aspas y el trino una hora más a mi existencia y la noticia activó mi
de los pájaros que vuelan incesantes en el cielo. conciencia;
“Estimados oyentes el viento nos ha abandonado”
Veo las largas hileras de aerogeneradores a mi Me quedé pensando:
alrededor entre los extensos campos de cereales. ¿Puede abandonarnos el viento? ¿Pueden agotarse los
combustibles fósiles? ¿Puede desaparecer la radiactividad?
Huelo el maravilloso olor de los tilos en la Entonces caí en la cuenta: No hay un antes ni un después
montaña, y el de las flores que acuden a la para el viento. El viento es parte del tiempo.
llamada de la primavera. Reconfortado abrí la ventana y entró brisa.
En ese momento entendí que de lo que me puedo fiar es
Siento el golpe de las gotas de lluvia sobre mi ¡del Viento!
piel y el cálido tacto de la tierra en la que estoy
sentado; n EL RETORNO DEL LEGENDARIO CABALLERO.
Luis del Moral Martínez
Y mientras que mis sentidos hacen gozar a mi Enfoqué al aerogenerador con mi cámara y divisé la
cerebro, silueta de un jinete que cabalgaba en el horizonte. Su
caballo trotaba a galope tendido y él apuntaba con su
Sé que entre todos estamos construyendo un lanza a la enorme estructura. Cuando pulsé el disparador
mundo mejor. para capturar el momento, una nube de polvo nubló mi
vista, el caballero desapareció y las hélices se detuvieron.
n HUECO DE TENSIÓN. Jaime Sánchez López- No se sabe dónde fue, pero las corrientes de aire en
Davalillo España se han detenido. Su búsqueda empieza a ser
El hueco de tensión hizo que toda la cadena de cargas, desde la desalentadora. Hoy me dirijo a Consuegra a máxima
punta de la pala hasta el foso de la cimentación, vibrase por velocidad, con un plan preparado y con mi cámara lista.
encima de la frecuencia natural. He tenido una corazonada...
Bamboleante, el aerogenerador recuperó potencia a medida jul-ago 15 n energías renovables 23
que la proporcional comandaba el sistema de pitch y giraba las
grandes velas al viento que formaban las palas. Los segundos
de ascenso en la rampa de activa confirmaron lo que todos
preveían, el parque eólico, de manera serena y calculada, volvía
a verter energía a la red convirtiéndose en el guardián del
sistema. La generación estaba asegurada.
n ENSÉÑAME A SOPLAR. Carmen Fernández de Vega
Ventolina por fin llegó al parque eólico. Su cuerpo estaba aún
desencajado. Tras su creación, la habían transportado por
piezas en diferentes tráilers. En la carretera los conductores se
quedaban boquiabiertos al verla pasar tumbada. Ahora se
sentía sofocada y preocupada.
– ¿Dónde nace el viento?, se preguntó.
Eolo, que la escuchó, le dijo
– En los mofletes de los humanos.
– Y tú, ¿sabes soplar?
– No.
– Y ellos por qué soplan?
– Para vernos girar.
– ¿Qué hago yo aquí?
– Relájate querida, y déjate llevar. Los humanos agradecen
nuestra generosa humanidad. Mira este parque: aunque sin
árboles, cada día tiene más sombra.