Algeruz II (de 27,35 megavatios de capacidad), Conde (13,51 megavatios), Alcochete I (32,89 megavatios) y Alcochete II (12,72 megavatios). Son los cuatros campos solares fotovoltaicos que Iberdrola está ejecutando ya al sur de Lisboa, en el distrito de Setúbal. La compañía estima que, "durante las obras de construcción, que está previsto se prolonguen durante este año, se crearán 500 puestos de trabajo en periodos de actividad punta" y calcula que, una vez estén operativas, "podrán generar suficiente energía limpia para abastecer a más de 48.000 familias, evitando así la emisión a la atmósfera de 56.000 toneladas de CO2 al año".
Las plantas de Alcochete I y II, contarán con tecnología bifacial. La tecnología bifacial consigue una mayor eficiencia en la planta, ya que cuenta con dos superficies sensibles a la luz (una en cada cara de la placa). Así, se produce electricidad desde ambos lados del panel, debido a que este tiene una lámina transparente en lugar de materiales opacos. Un sistema de seguidores permite el movimiento de los módulos en función de la trayectoria del sol, maximizando así la captación de energía y alargando la vida útil de la planta al sufrir una menor degradación. Además, las células solares bifaciales -explican desde Iberdrola- reducen el coste medio de la electricidad en un 16%.
Iberdrola declara "una cartera de 81.800 MW renovables, de los que 17.300 MW se ubican en la Península Ibérica". Además, asegura que "unos 15.000 MW de estos cuentan con derechos de conexión". En España, la compañía cuenta a día de hoy con una capacidad instalada de 19.000 MW, que espera elevar a 25.000 MW de aquí a 2025. Según los datos facilitados por la compañía, el parque Iberdrola de generación asciende a los 37.000 MW.
En Portugal, Iberdrola da servicio a una cartera comercial de más de 870.000 puntos de suministro, cuenta con 92 MW eólicos en operación y está poniendo en marcha la gigabatería del Támega, uno de los grandes proyectos de bombeo de Europa, de 1.158 MW. Este complejo comprende tres embalses (Gouvães, Daivões y Alto Támega) y tres centrales hidroeléctricas, que irán entrando en funcionamiento progresivamente hasta 2024.
