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AHORRO Y EFICIENCIA
La increíble y triste historia
de la cándida eficiencia
y su política desalmada
La lectura de la transcripción de la directiva 2012/UE del 25 de octubre de 2012, de Eficiencia
Energética, a través del Plan de Acción 2014/2020, con una extensión de más de 150 páginas,
evoca la novela de García Márquez ‘La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y de su
abuela desalmada’. Y la evoca por el maltrato que la desalmada abuela, la política, ha dado
históricamente a la cándida y lánguida Eréndira, la eficiencia energética. Agustín Aragón*
L a abuela precisó siempre, y sigue precisando, del cui- dadano: si usted puede España no puede, se publicitaba. En to-
dado de la joven Eréndira; y sin embargo ésta ha sido dos los países se crean organismos ad hoc para estos análisis. Y
permanentemente maltratada y prostituida por su en España se crea el Centro de Estudios de la Energía. Y se re-
abuela. Y así hasta que apareció el joven Ulises, que dacta el Plan Energético Nacional (PEN) 75 donde se citan al-
enamorado de Eréndira la libera, no sin dificultad, de gunos vagos objetivos de ahorro y nada más; y con una obsesión
su abuela, y la joven empieza a caminar sin que nada ni nadie decretista que llega a racionar el combustible para calefacción de
pueda ya detenerla. edificios por el RD 2344/76.
Pero la historia de nuestra Eréndira es aún más triste porque ¡Ah! y se redacta el RD 1490/75 de aislamiento térmico de
su desalmada abuela la ignoró durante más de 15 años antes de edificios nuevos exigiendo el mismo nivel en Albacete que en
prostituirla. Y para ello decidió contar sólo con la ayuda del her- León pues los redactores ignoraban que el consumo no depen-
manastro Ahorro. Y las dos amantes de éste: las hermanas Con- de de las temperaturas extremas sino de las medias (grados días)
servación y Diversificación, que no tuvieron mucho éxito por ¡Cuánto ha tenido que aprender el sector! y lo que le queda. Y
lo voluble y caprichoso que siempre se mostró Ahorro, pero que el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) se opo-
consiguieron ocultar la presencia y utilidad de nuestra cándida nía a desarrollar este decreto a través de normas técnicas que fa-
Eficiencia. Es curioso, pero un comportamiento así, de una cilitaran su aplicación (“ladras luego cabalgamos” me dijeron
abuela para con su mejor nieta, sólo es posible por su ignorancia los partidarios de aplicar la electricidad para la calefacción).
y su desmedida concupiscencia que condiciona de raíz su com-
portamiento. Y llega el PEN 78. Y con él la política –la abuela desalmada–
sustituye a Ahorro, y utiliza ahora a la amante de éste, Conser-
n Hace 41 años vación, con la que confiesa vagamente que va a tomar algunas
medidas acordes con la naturaleza de ella. Adviértase que:
Así, la cosa empieza hace ya 41 años, cuando en 1974 con la
guerra del Yom Kippur el precio del barril de petróleo se multi- Conservar según la RAE es “cuidar algo para que se man-
plica por 5,5. Es la llamada primera crisis del petróleo: como re- tenga a lo largo del tiempo”. Y esto refleja el espíritu de la abue-
acción a las decisiones de la Organización de Países Exportado- la en aquel tiempo: tenia pánico a que le faltase petróleo, y sólo
res de Petróleo (OPEP) de finales del 73 se crea en noviembre se le ocurría conservarlo. Curioso comportamiento intentar
del 74 la Agencia Internacional de la Energía (AIE). El petróleo conservar lo que no se tiene. En fin… así era la abuela.
se vuelve caro y no se puede gastar como antes: hay que aho-
rrar… petróleo… no otras fuentes de energía. Y es que entre el 78 y 80 el precio del crudo se multiplica por
2,7. Es la segunda crisis del petróleo, y pies –de la amante Con-
No olvidemos que Ahorrar es un concepto restrictivo: reser- servación– para qué os quiero… El MOPU promete una Ley Bá-
var parte del gasto ordinario, dice la Real Academia Española sica de la Edificación para compensar su oposición al desarrollo
(RAE). Y a ello se acoge la abuela en toda Europa: ¿cuánto se del 1490/75 y la abuela se neurotiza al no avanzar en los aspectos
consume? ¿Qué se puede hacer para ahorrar? Concienciar al ciu- técnicos. Y consigue salvar el final de la década con la Ley 82/80
o, cómo no, ley de Conservación de la Energía. (La cándida Efi-
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