Tras conocer a los principales adjudicatarios de la subasta de potencia eléctrica de energía renovable del pasado miércoles, la búsqueda de la noticia se centró en saber qué otras empresas eran las beneficiadas de la pedrea de veinte megavatios que quedaron colgando. Las primeras consultas apuntaban a la hidráulica, y en ningún caso a la bioenergía en general, aunque al final resulta que el biogás sí ha sido agraciado con la pedrea, al menos con seis instalaciones.
De esta manera el biogás se convierte en la tecnología con más potencia detrás de la eólica, aunque hablamos de un segundo puesto a una distancia interestelar del primero: 14 megavatios frente a 2.979. Por este motivo el sector no está ni mucho menos satisfecho con estas “migajas”, sobre todo teniendo en cuenta que actores del mismo, como la empresa Biovec, pedían reservar un tres por ciento (90 megavatios) para ajustar la subasta a la realidad.
Ni 90 ni 30 megavatios, sino 15
En las alegaciones presentadas por la Asociación Española de Biogás (Aebig) a la propuesta de orden que regula la subasta, pedían un cupo mínimo de treinta megavatios y “prescindir de la limitación de horas (retribuidas), dadas las características del proceso biológico, imposible de paralizar por períodos intermitentes”. Precisamente otra propuesta era permitir que las plantas ahora existentes desarrollen toda su potencia eliminando esa limitación de horas de funcionamiento máximas.
Ninguna de las alegaciones se han tenido en cuenta y la subasta ha repartido solo quince megavatios entre instalaciones del sector agroindustrial, el menos desarrollado en España y uno de los menos desarrollados de Europa, y el de la estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) y vertederos de residuos sólidos urbanos. A falta de conocer con mayor precisión el reparto, ganan los segundos (unos nueve megavatios) al agroindustrial (en torno a cinco megavatios).
Los nombres propios del biogás en la subasta
Estos últimos se los reparten Agroenergía de Campillos (300 kilovatios) y Biogastur (4.500 kilovatios). La primera dispone ya de la primera planta agroindustrial (1,9 megavatios) que se asentó en Andalucía, en concreto en Campillos (Málaga) asociada principalmente al aprovechamiento de purines de granjas porcinas.
Los 4,5 megavatios de Biogastur tienen nombre propio: una planta de cogeneración que se ubicará en Navia (Asturias) y que parte de un acuerdo con Central Lechera Asturiana. Las previsiones eran que esté construida en esta misma primavera y se convierta así en la de mayor potencia de las agroindustriales presentes en España.
En cuanto a las instalaciones asociadas a EDAR y vertederos de residuos, los adjudicatarios son el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia, con 4.241 kilovatios; Energía Sur de Europa, con 2.126; OMS Sacede SAU, con 260; y Vertedero de Residuos SA (Vertresa, con 2.500).