"No hay que descartar que en 2016 haya una nueva convocatoria". Estas fueron parte de las declaraciones que el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, hizo a Europa Press poco después de que el BOE publicara el 4 de diciembre la resolución “por la que se convoca la subasta para la asignación del régimen retributivo específico a nuevas instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de biomasa situadas en el sistema eléctrico peninsular y a instalaciones de tecnología eólica, y se establecen el procedimiento y las reglas de la misma”.
Con anterioridad, el 17 de octubre, se publicó el real decreto con el que se daba luz verde a una convocatoria que llevan esperando desde entonces las empresas y enclaves candidatos, y que en un principio se pensaba que se iba a fijar para el 26 de noviembre. Tras días de incertidumbre, la resolución del 4 de diciembre confirma que la fecha de la subasta será el 14 de enero de 2016 y que el cierre de plazo para la entrega de la documentación para la recalificación y calificación se marca para el 11 de enero.
Hunosa, Ence y Gestamp entre las candidatas
Tras el parón renovable con la moratoria del real decreto ley 1/2012, la subasta de 200 MW de biomasa será la segunda ocasión que tengan algunas instalaciones de entrar en el régimen especial de retribución. Antes lo obtuvieron 37 MW de biomasa y biogás en la adjudicación de 120 MW a instalaciones de estas renovables y cogeneración que no fueron inscritas en dicho régimen a pesar de tener avanzada su tramitación antes de la moratoria.
En la resolución del 15 de julio de 2015 de los 120 MW se quedaron fuera algunas plantas (Gestamp en Miranda de Ebro y Soria y Aldebarán en Andújar, Jaén) que seguramente lo intenten de nuevo en la subasta del 14 de enero de 2016. A ellas les acompañarán instalaciones de Solmasol, Eco2 Biomasa, Ence y Hunosa. Esta última no aprovechará su térmica de carbón de La Pereda, en Mieres (Asturias), con la que ha participado en un proyecto de co-combustión de pélets (Pelet-In). En este caso tiene previsto construir una nueva de 50 MW en el polígono de Reicastro.
Oposición de Ecologistas en Acción
Ecologistas en Acción es una de la ONG que con mayor ahínco cuestiona el desarrollo de la producción de electricidad con biomasa, como lo puso de manifiesto recientemente en su propuesta Hacia un escenario energético justo y sostenible en 2050. Desde su delegación en Huesca están especialmente activos contra la que denominan “incineradora de biomasa proyectada en Monzón”.
En un informe publicado en noviembre consideran que la planta agravará los problemas de contaminación del entorno al incrementar las emisiones de “dióxido de azufre, óxidos de nitrógeno, partículas en suspensión y sustancias peligrosas como los benzopirenos” y situarse a tan solo 600 metros del casco urbano de Monzón. Días después, el alcalde de esta localidad oscense, Álvaro Burrel, declaraba a la prensa que estas afirmaciones provocan un “alarmismo social y un clima de miedo, inseguridad y crispación infundados”.