La gran industria exige a Bruselas que desacople el precio de la luz del precio de los combustibles fósiles

El desacoplamiento del precio de los combustibles fósiles (gas natural y carbón) de la fijación del precio eléctrico en el mercado "es la única medida viable y con impacto para poder mantener la actividad industrial y el empleo". AEGE, Feique y Unesid han liderado el envío de sendas cartas a los comisarios del Mercado Interior y de la Energía de la Unión Europea haciéndoles partícipes de la "situación de alerta industrial" y exigiéndoles la adopción de "medidas urgentes e inmediatas", la primera de las cuales sería ese desacoplamiento. Las asociaciones recuerdan que, ya desde el pasado verano, las industrias electrointensivas padecen "una gravísima crisis energética generada por la evolución del precio del gas y los derechos de emisión", una crisis que se ha visto agravada con la guerra de Ucrania, todo lo cual ha desembocado en lo que denominan "una emergencia industrial sin precedentes".

Las asociaciones advierten a los dos Comisarios que, si la escalada de precios eléctricos es generalizada en toda la UE, "las peculiaridades del mercado ibérico hacen aquí la situación mucho más crítica". Las empresas se refieren a que, en España, más del 80% del consumo industrial está expuesto al precio del mercado eléctrico diario. Es decir, que si el mercado eléctrico diario se dispara (como está sucediendo), ese disparo repercute ipso facto en los precios que han de pagar.

La alternativa es comprar electricidad fuera del mercado mayorista: comprarla directamente al generador mediante un contrato bilateral directo productor-consumidor.

El problema es que -se queja la industria- los generadores, las compañías eléctricas, no están sacando al mercado contratos bilaterales con precios anteriores a la crisis. Antes al contrario, estarían aprovechando la escalada de precios para ofertar contratos bilaterales en los que ya viene repercutida la escalada del precio del gas.

Y lo estarían haciendo, aunque las empresas eléctricas apenas generan una cuarta parte de la electricidad con gas natural. El 75% restante lo producen en instalaciones -nuclear, gran hidráulica, eólica, solar- que  no queman gas para generar electricidad y que, por lo tanto, presentan hoy costes muy similares a los de ayer. 

[Sobre el particular léase Ocho patronales le piden al Gobierno que intervenga el mercado eléctrico ante la ausencia de contratos bilaterales].

Las asociaciones dicen en sus cartas que “es imposible mantener la actividad con estos precios eléctricos” y que, de no enderezarse la situación en los próximos días, muchas empresas ya en cierres temporales se verán obligadas a poner en marcha expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) y posibles deslocalizaciones de producción; a la vez, otras que no pueden parar sus instalaciones comienzan a reducir producción al mínimo permitido, como algunas electrolíticas.

La alerta -continua la carta a los Comisarios- afecta a toda la industria española consumidora de electricidad, "con mayor incidencia en los sectores electrointensivos como siderurgia, química, metalurgia no férrica, los gases industriales, cemento…".

Frente a ello, las patronales piden tanto a las instituciones europeas como al Gobierno español "medidas de emergencia acotadas y temporales", que consideran absolutamente imprescindibles "para salvaguardar la industria básica, la economía española y el empleo de cientos de miles de trabajadores afectados".

Las asociaciones piden que, habida cuenta de esta "situación de emergencia nacional y europea", el Consejo Europeo del 24 y 25 de marzo adopte "una decisión urgente, reformando inmediatamente el mercado marginalista eléctrico mientras dure esta crisis energética, desacoplando el precio de los combustibles fósiles (gas y carbón) de la fijación del precio eléctrico en el mercado. La medida es la única viable y con impacto, e imprescindible para poder mantener la actividad industrial y el empleo en España".

Las asociaciones firmantes apoyan la posición del Gobierno español (también partidario de ese desacoplamiento) y piden "medidas efectivas que puedan entrar en vigor el 1 de abril". Las patronales sin embargo no comparten la propuesta del Ejecutivo de colocarle un tope de 180 euros al precio del megavatio hora en el mercado mayorista diario. "Ni topes artificiales de los precios, ni medidas fiscales -que por su propia naturaleza no pueden tener un efecto inmediato en el mercado-, son válidas en momentos de emergencia", dicen.

Las asociaciones reiteran a los Comisarios que "el momento es crucial, en mitad de una guerra que ha agravado la alerta industrial, que, de no atajarse, pondrá en serio riesgo el futuro económico de España y de Europa".

Firmantes
La Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía agrupa a 26 compañías, que tienen 76 fábricas repartidas por toda España, cuya demanda supone el 10% de la demanda anual eléctrica peninsular. Según AEGE, sus asociados facturan alrededor de 20.000 millones de euros y emplean a 66.000 personas (empleo directo).

Unesid
La industria siderúrgica es la base de la cadena de valor metal-mecánica: automóviles, todo tipo de maquinaria, infraestructuras… tienen en el acero un componente fundamental. Según los datos facilitados por la propia patronal, la siderurgia española produce unos 14,2 millones de toneladas de acero al año y exporta por valor de unos 10.000 millones de euros.

Unesid es la asociación empresarial española de las empresas siderúrgicas y de la primera transformación y aglutina 46 empresas, que dan empleo a unas 50.000 personas, además de las 20.000 que intervienen en la recuperación de chatarra. El sector declara una facturación en su conjunto de más de 14.000 millones de euros.