La hibridación termosolar-biomasa alcanzó uno de sus primeros logros con la planta Termosolar Borges, ubicada en Les Borges Blanques (Lleida). Poco después, el polígono industrial de Villalonquéjar, en la ciudad de Burgos, veía como, asociado a la empresa de cosméticos L’Oréal, se construía primero y se consolidaba y extendía después un sistema de trigeneración biomasa-solar fotovoltaica. Gracia al proyecto Tribar se ha conseguido ahora trigenerar con biomasa y termosolar.
Antonio Manuel Reyes, profesor titular de la Escuela de Ingenerías Industriales de la Universidad de Extremadura (UEx), otro de los socios de Tribar, explica que el objetivo de la planta recién inaugurada es “obtener electricidad, frío industrial y calor mediante un sistema compacto, modular, escalable y portátil que hibride energía solar y aproveche residuos biomásicos agrícolas o forestales”.
En la nota de prensa de la UEx concretan que la planta “está diseñada para cubrir las necesidades específicas de la empresa Marle y compuesta por una caldera, un campo solar de tipo Fresnel, una turbina, una máquina de absorción, un sistema de disipación de calor y un sistema de control general”.
Sistema completamente modular y escalable
Una instalación de tecnología Fresnel es una de las variantes que existen dentro de las centrales termosolares y una de las que mejora se adapta para los sistemas modulares y escalables con los que se trabaja en Tribar. Reyes añade que “se ha modulado la planta en dimensiones múltiplos de las medidas de un contenedor de seis metros, conformándose sobre estos módulos el sistema de captación tipo Fresnel”.
La instalación está diseñada principalmente para atender las necesidades energéticas de industrias del sector agroalimentario y forestal que generen residuos orgánicos. Se considera especialmente interesante para demandas estacionales intensivas y en emplazamientos aislados o cuyo acceso a la electricidad y los combustibles fósiles resulta caro y complicado. Se potencia así también la generación distribuida.
Ideal para empresas con picos de producción
El profesor de la UEx pone el ejemplo de una bodega que tuviera contratada mucha menos potencia eléctrica y usara como fuente de energía el sol y sus propios residuos. “Menos potencia –señala– porque pueden generar parte de la necesaria, pero además consumirían menos energía eléctrica porque el frío industrial necesario para el control de la fermentación de los mostos también pueden generarlo con fuentes de energías abundantes y renovables”.
"Es una solución muy a tener en cuenta en instalaciones donde se trabaja masivamente en una fracción temporal muy concreta, en las que se trabaja en campañas diferenciadas en el tiempo y en las que el aporte energético sea muy caro o muy difícil de proveer", concluye Reyes.
Tribar es un proyecto subvencionado por el CDTI, del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, a través de la convocatoria Innterconecta, cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). Además de Marle y la UEx, participan en el mismo la Consejería de Economía e Infraestructuras de Extremadura y las empresas Cobra, Auscultia, Gamma Solutions y Gestiona Global. Cuenta con un presupuesto de casi dos millones de euros.