¿Primero de esos globos sonda? Un hipotético "principio de acuerdo" entre el Gobierno y las eléctricas sobre el calendario de cierre de los siete reactores nucleares que operan actualmente en España. El "principio de acuerdo" habría sido alcanzado durante la reunión que tuvo lugar ayer en el Ministerio para la Transición Ecológica, reunión en la que participaron la ministra del ramo, Teresa Ribera, y los máximos responsables de las tres grandes compañías eléctricas del mercado patrio, compañías que son las propietarias de las centrales nucleares que operan actualmente en territorio nacional. Pues bien, según diversos medios, el Gobierno y las empresas (Endesa, Iberdrola y Naturgy) habrían acordado que ninguna central se cierre antes de 2025 ni más allá de 2035. Eso significaría que algunas de esas instalaciones podrían llegar a operar medio siglo. Trillo, por ejemplo, comenzó a operar en agosto de 1988 (fue la última en comenzar a hacerlo), así que en 2035 llevaría 47 años operando. Almaraz I comenzó a funcionar en 1983, o sea, que en 2035 podría llevar 52 años. El hipotético "principio de acuerdo" encajaría en el discurso de Endesa, que hace apenas unos meses explicitaba su postura por boca de su consejero delegado, José Bogas: "es imprescindible la extensión de la operación de las centrales nucleares hasta los 50 ó 60 años", dijo Bogas el pasado mes de abril nada más y nada menos que ante la Junta General de Accionistas de la compañía.
Casi simultáneamente, en marzo (de 2018), el PSOE publicaba un documento con propuestas "para una estrategia de transición energética" en el que apostaba por cerrar todas las térmicas de carbón en 2025 y todas las nucleares en 2028. El documento se titula «Propuesta de bases para una estrategia de transición energética», ha sido elaborado por un equipo de expertos integrados en el Consejo Asesor para la Transición Ecológica de la Economía (consejo creado por el PSOE y presidido por la hoy ministra Teresa Ribera) y no es sino una hoja de ruta "hacia una economía descarbonizada 2030-2050" que establece efectivamente, como su propio nombre indica, las bases de una Estrategia de Transición Energética. Entre los objetivos que el PSOE marca en esa hoja de ruta, destacan tres: retribución "de forma adecuada y estable" a los excedentes de las instalaciones de autoconsumo; "cierre ordenado de las centrales térmicas de carbón antes de 2025 (...); y cierre ordenado de las centrales nucleares a medida que vayan cumpliendo los 40 años de vida" (la última los cumple en 2028, Trillo).
De momento, en todo caso, no ha habido desmentido, ni confirmación oficial alguna, sobre el particular. Ni por parte del Ministerio, ni por parte de las compañías aludidas: Endesa (cuyo principal accionista es el Ministerio de Hacienda de Italia), Iberdrola (cuyo principal accionista es el Fondo Soberano de Catar) y Naturgy. [Arriba, el cuadro con datos es de Foro Nuclear, la patronal del sector en España].
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