En su análisis, la entidad portuguesa encargada de la gestión de la energía eléctrica ha destacado el crecimiento interanual del 70% que ha experimentado la producción hidroeléctrica, especialmente después de un 2022 escaso en lluvias, así como un crecimiento del 43% en la producción fotovoltaica, debido al progresivo aumento de la capacidad instalada. Los índices de producibilidad de las fuentes de energía renovables estuvieron prácticamente en línea con los regímenes promedio, con un índice de 0,99 (promedio histórico igual a 1) para la hidroeléctrica, el mismo valor para la eólica y 1,01 para la producibilidad solar.
Además, la producción no renovable suministró sólo el 19% del consumo, totalizando 10 TWh, el valor más bajo desde 1988. Esto se debe no sólo a la mayor disponibilidad de energía renovable, sino también al elevado saldo importador, que suministró el 20% del consumo, tratando el valor más alto jamás registrado y su mayor participación en el abastecimiento del consumo desde 1981.
Energía eléctrica consumida
En total, el consumo de electricidad suministrada desde la red pública en 2023 alcanzó los 50,7 TWh, un aumento del 0,8% respecto al año anterior, o del 0,6% teniendo en cuenta la corrección por los efectos de la temperatura y el número de días laborables. Se trata del mayor consumo desde 2018, manteniéndose en torno al 3% del máximo histórico registrado en el sistema nacional, en 2010.
Respecto al mes de diciembre, el consumo registró un fuerte crecimiento del 6,9% o 5,6%, corrigiendo los efectos de la temperatura y los días laborables. En concreto, la producción renovable suministró el 73% de este consumo, la no renovable suministró el 11%, y el 16% restante correspondió al saldo importador. Durante este período, las condiciones fueron favorables para la producción hidroeléctrica, con un índice de productividad de 1,09, a diferencia de la producibilidad eólica y solar, que registraron índices de 0,83 y 0,91, respectivamente.
Mercado del gas natural
En lo que respecta al mercado de gas natural del pasado año, el consumo global en 2023 fue el más bajo desde 2014. REN detalla que se registró un consumo de 49 TWh, lo que significó una contracción del 21% respecto al año anterior debido a una reducción del 42% en el segmento de producción de energía eléctrica y un descenso del 3% en el segmento convencional. El suministro del sistema nacional en 2023 se realizó principalmente desde la terminal de GNL de Sines, entrando en Portugal el 95% del gas total y recibiendo el 5% restante a través de la interconexión con España.
El gas vertido en Sines procedía principalmente de Nigeria y Estados Unidos, que representaban, respectivamente, el 42% y el 40% del suministro nacional. En diciembre, el consumo de gas mantuvo la tendencia negativa registrada a lo largo del año, con una contracción interanual global del 11,5%. Se trata de una caída del 51% en el mercado eléctrico, parcialmente compensada por un crecimiento del 10% en el segmento convencional.
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