panorama

Análisis

Endesa: ¿injerencia italiana en la campaña electoral de España?

2
Clinton (Hillary) acusó a Rusia de interferir en las elecciones que llevaron a Trump a la Casa Blanca. El demócrata Joe Biden acusa estos días al mismo Donald de utilizar al presidente de Ucrania contra él. Biden fue vicepresidente de Estados Unidos en tiempos de Obama, se perfila como uno de los favoritos a convertirse en el próximo candidato demócrata a la presidencia de los Estados Unidos y, al menos presuntamente, Trump estaría interesado en quitárselo de enmedio. Entre tanto, Endesa, que es propiedad de la compañía italiana Enel, acaba de anunciar el cierre de sus dos centrales térmicas de carbón: As Pontes (A Coruña) y Litoral (Almería). Lo ha hecho 72 horas después de que el BOE publicase el Real Decreto (RD) "de Disolución del Congreso de los Diputados y del Senado y de Convocatoria de Elecciones" (Real Decreto 551/2019, de 24 de septiembre).
Endesa: ¿injerencia italiana en la campaña electoral de España?

¿Pie de foto? El presidente de Endesa, Borja Prado, anuncia (hace apenas unos meses), ante el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, que la compañía invertirá más de 200 millones de euros en modernizar sus instalaciones de As Pontes (allí posan todos los protagonistas de esta imagen) para poder seguir operando en el nuevo marco regulatorio europeo (más exigente en lo que se refiere a emisiones de gases contaminantes). ¿Titular de la información de hoy? Pues podría ser, por ejemplo, "el Gobierno italiano cierra las térmicas de Endesa de Coruña y Almería". Por ejemplo. Porque resulta que el Grupo Enel posee el 70,1% de Endesa. Y porque resulta que el accionista mayoritario del Grupo Enel es el Ministerio de Economía y Finanzas de Italia. El Gobierno de España publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado martes, 24 de septiembre, el Real Decreto de Convocatoria de Elecciones (RD 551/2019). Pues bien, 72 horas después, el Grupo Enel anunciaba oficialmente en Roma el cierre de las centrales de carbón de As Pontes (A Coruña) y Litoral (Almería).

Empresa Nacional de Electricidad, Sociedad Anónima
Creada en 1944 por el Instituto Nacional de Industria (INI), Endesa (Empresa Nacional de Electricidad, Sociedad Anónima) fue una empresa pública española durante más de 50 años. En 1994, el Estado español controlaba el 66,89% del capital. Solo cuatro años después, en 1998, la empresa ya era privada. En medio, la victoria en las urnas (1996) de Aznar, Rato y compañía... y la mano de Rodolfo Martín Villa, que llegaría a principios de 1997 a la entonces mayoritariamente pública Endesa para abandonarla ya completamente privatizada en 2002. Martín Villa es a día de hoy presidente de honor de la compañía.

Precisamente el año pasado, durante la Junta General de Accionistas, el actual consejero delegado de la compañía, José Bogas, señalaba como el "elemento clave en la trayectoria de éxito que estamos trazando, el elemento más diferenciador de nuestra empresa", al equipo humano de Endesa: "de ello -dijo-, son buen ejemplo los Presidentes de Honor Rodolfo Martín Villa y Manuel Pizarro, que nos honran hoy con su presencia".

Martín Villa ha sido un hombre muy bien situado desde su juventud universitaria: jefe nacional del SEU, gobernador civil, jefe provincial del Movimiento en Barcelona en 1974, senador por designación del Rey en 1977 y destacado miembro del Partido Popular desde su fundación, en 1989, fue el hombre clave en la transición a la privatización de Endesa. Su sucesor, Pizarro, número 2 del PP en Madrid en las elecciones que perdió Rajoy en 2008, fue el otro.

En fin, que Enel anunció en Roma el viernes que el Consejo de Administración de Endesa ha decidido interrumpir la generación de sus térmicas de carbón de España "y evaluar las opciones futuras para las instalaciones afectadas, de conformidad con los procedimientos establecidos en la normativa vigente".

Motivos esgrimidos
Según reza el comunicado que difundió la compañía italiana, la decisión ha sido tomada "a la luz de los cambios estructurales y significativos registrados sobre ciertos factores en 2019, particularmente los precios del carbón y del CO2", que "han impactado negativamente en la competitividad de las plantas de carbón, haciendo que la posibilidad de operarlas en el mercado eléctrico en el futuro sea altamente improbable". El valor neto registrado en la contabilidad de la empresa de las dos centrales de carbón afectadas asciende -según Enel- a aproximadamente 1.500 millones de euros, incluidos los costes de desmatelamiento.

Se da la circunstancias de que, hace apenas dos años, en la Junta General de Accionistas celebrada en Roma en mayo de 2017, Enel anunció que se realizarían inversiones en las centrales de As Pontes y Litoral para cumplir con la normativa de la Unión Europea y poder seguir operándolas hasta el año 2030.

Y, efectivamente, tal y como apuntamos arriba, en marzo de 2018, el presidente de Endesa, Borja Prado, anunciaba de visita en As Pontes, y ante el presidente de la Xunta, el popular Alberto Núñez Feijóo, una inversión de más de 200 millones de euros "para cumplir con las normativas medioambientales europeas más exigentes".

En su discurso, Prado agradecía a la Administración la agilidad con la que había tramitado el proyecto de reforma de As Pontes y subrayaba que Galicia “es clave para nuestra compañía”, y “tenemos la voluntad de contribuir al desarrollo y a la mejora de la calidad de vida de su gente”. Clave.

Ahora, a poco más de un mes de las elecciones, la compañía italiana anuncia por sorpresa la clausura de Litoral y As Pontes. El cierre afecta a unas trescientas personas y ya ha suscitado reacciones políticas de primer nivel.

La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, tuiteaba, apenas unas horas después de conocida la noticia lo siguiente: "Sigo de cerca -y con preocupación por trabajadores y vecinos- la evolución de #endesa y sus centrales de #AsPontes y #Litoral. Esta semana convocaré a la empresa, las autoridades locales y los representantes sindicales para escuchar y valorar juntos la situación y perspectivas".

Las preguntas se amontonan
¿Por qué ha elegido la italiana Enel precisamente este momento -72 horas después de convocadas las elecciones- para anunciar el cierre? ¿Acabará el Estado español pagándole a la compañía italiana la "transición justa" hacia un modelo descarbonizado? ¿Acabará haciéndolo el Gobierno Sánchez para sofocar el descontento en campaña electoral? ¿Acabará haciéndolo aunque Endesa ha ingresado en los seis primeros meses del año casi 10.000 millones de euros? ¿Deben los estados controlar los sectores estratégicos, como el energético, para evitar potenciales interferencias? El Estado italiano es el principal accionista de Enel; el Estado francés es el principal accionista de EDF; el Estado noruego es accionista único de Statkraft. ¿Puede una potencia extranjera intervenir en la política doméstica de un vecino sin necesidad de operar bots? ¿A quién beneficia electoralmente un anuncio como este? Juzgue el lector.

La compañía
Endesa, empresa del Grupo italiano Enel, presume de ser "la compañía eléctrica líder de España dedicada a la producción, la distribución y la venta de energía eléctrica". Endesa posee instalaciones de producción de energía eléctrica en España y Portugal, con una capacidad instalada de más de 23 gigavatios (23.766 megavatios), produjo en 2018 aproximadamente 75 teravatios hora y tiene alrededor de 10.750.000 clientes. Endesa declara además unos 1,6 millones de usuarios finales de gas. La empresa tiene casi 10.000 empleados.

Grupo Enel
Enel pasa por ser "la mayor empresa de servicio público de Europa en cuanto a capitalización del mercado". El grupo está presente en más de treinta países de todo el mundo y produce energía eléctrica, distribuye electricidad y gas a través de una red de más de 2 millones de kilómetros "y, con más de 65 millones de empresas y hogares como clientes en todo el mundo, tiene la mayor base clientelar de entre los competidores europeos". Según los datos difundidos por la compañía italiana, su división de energías renovables, Enel Green Power, ya gestiona más de 39 gigavatios de plantas eólicas, solares, geotérmicas, de biomasa e hidroeléctricas en Europa, América, Asia y, recientemente, Australia.

Artículos relacionados
• Los nuevos aires de Endesa: 500 megavatios de potencia eólica y 339 de solar fotovoltaica; 800 millones de inversión en el bienio 2019-2020

• Endesa considera imprescindible alargar la vida de las centrales nucleares hasta los 60 años

• Endesa ingresa en los seis primeros meses del año casi 10.000 millones de euros

• Mujeres Wayuu miran a Endesa

Sobre Rodolfo Martín Villa

Añadir un comentario
Alfredo
¿Zapaqué? Por favor, un poquito de rigor.
Jon Goikoetxea
Al redactor del artículo se le olvida ¿deliberadamente? que el artífice de la venta de Endesa a la italiana ENEL fue el infame de Zapatero, y que la oposición en bloque se opuso frontalmente a la operación por la perdida de la Españolidad de Endesa.
Baterías con premio en la gran feria europea del almacenamiento de energía
El jurado de la feria ees (la gran feria europea de las baterías y los sistemas acumuladores de energía) ya ha seleccionado los productos y soluciones innovadoras que aspiran, como finalistas, al gran premio ees 2021. Independientemente de cuál o cuáles sean las candidaturas ganadoras, la sola inclusión en este exquisito grupo VIP constituye todo un éxito para las empresas. A continuación, los diez finalistas 2021 de los ees Award (ees es una de las cuatro ferias que integran el gran evento anual europeo del sector de la energía, The smarter E).