El pasado once de mayo fue declarada competente en este caso la Sala Tercera, Sección Tercera, del Tribunal Supremo. Y, ahora, y según informara ayer el Boletín Oficial del Estado, la sala susodicha informa que ha admitido a trámite el recurso de Aspapel (el caso figura registrado con el número 1/885/2015). El Tribunal Supremo suma así uno más a los aproximadamente 400 recursos que contra esta Orden han sido ya interpuestos. Entre ellos, se encuentran los de asociaciones como la Unión Española Fotovoltaica, Protermosolar (que es la patronal del sector termosolar), la Asociación de Empresas para el Desimpacto Ambiental de los Purines, la Asociación Española de Fabricantes de Ladrillos y Tejas de Arcilla Cocida, Anpier (que es la Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica) o la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA). Asimismo, han presentado recurso contra esa Orden empresas a título particular, como Enel Green Power, EDP Cogeneración, Fenosa Wind, Sanlúcar Solar, Ence, Helioenergy Electricidad Uno, Solnova Electricidad, Solucia Renovables, Sener Grupo de Ingeniería, Acciona, etcétera, etc.
Aspapel
La Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón (Aspapel) se define como "una organización profesional de ámbito estatal, que agrupa a las empresas del sector de la celulosa y el papel; las empresas asociadas (unas 60) suponen más del 90% de la producción del sector". Entre todos los sectores industriales españoles, el papelero presume de ser "el mayor productor y utilizador de energía renovable procedente de la biomasa: la biomasa supone el 32% de los combustibles totales utilizados y el gas natural, el 65%". Con una potencia instalada en cogeneración de 1.135 MW -informa la patronal-, el sector papelero no solo produce la energía que consume sino que aporta sus excedentes al sistema, "y se ha conseguido desacoplar la evolución de las emisiones tanto de la producción de papel y celulosa como de la generación de electricidad" (todos estos datos han sido extraídos del Dosier Papel 2014, de noviembre de 2014).
Según Aspapel, aproximadamente el 70% de sus residuos de fabricación se valorizan por distintas vías. Las principales son la valorización energética, fundamentalmente en la propia fábrica (25,3%), pero también en otras (2,2%), el uso directo agrícola (22,1%) y el compostaje y su uso como materia prima en otras industrias, como la cementera o la cerámica (12%). Los residuos con destino a vertedero se han reducido de manera muy importante -informa Aspapel- en los últimos años, en los que han pasado a representar del 35% en 2010 al actual 19%. La patronal destaca en este extremo "el gran avance producido en el uso de estos residuos como combustible fundamentalmente en la propia fábrica, que ha pasado de apenas un 3% en 2010 a casi el 28% actualmente" (datos Aspapel de julio de 2015).
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