El Gobierno español pidió el pasado 5 de julio al Consejo de Seguridad Nuclear que interrumpa los trabajos sobre el Informe del Permiso de Construcción, una autorización clave para continuar con el ATC (el Ejecutivo ha publicado esa información hoy). Y el Movimiento Ibérico Antinuclear (MIA), del que forma parte Ecologistas en Acción, ha calificado de "adecuada" esa decisión gubernamental. El MIA y Ecologistas en Acción -que siempre ha catalogado como "error" ese proyecto- han difundido hoy un comunicado en el que recuerdan que "el origen del cementerio fueron las pretensiones del antiguo Gobierno del Partido Popular, y en concreto de María Dolores de Cospedal, para que este cementerio se construyera en la Comunidad Autónoma que ella presidía, Castilla-La Mancha, lo que le otorgaba un control sobre la gestión de los residuos y sobre la política nuclear".
El proyecto de construir un Almacén Temporal Centralizado -informa Ecologistas- aparece en el 6º Plan General de Residuos de 2006, "ya obsoleto". Según esta organización no gubernamental, el retraso que padece este proyecto "se debe a las malas condiciones geológicas de los terrenos sobre los que se asentaría el Almacén, un hecho que ha quedado patente en los informes del área de Ciencias de la Tierra del propio Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y de la consultora URS, que trabaja a menudo para el Consejo". En ese sentido, los ecologistas explican que "los posibles riesgos de hundimiento y otras características geológicas de estos terrenos convertían el Almacén Temporal Centralizado en una instalación muy peligrosa que disparaba los costes de construcción".
Ecologistas denuncia
"A pesar de que ese era motivo más que suficiente para paralizar el ATC de Villar de Cañas -señala la oenegé-, sucesivos gobiernos y el empeño de Cospedal han mantenido el proyecto acumulando gastos innecesarios". El caso es que, ante la falta de un almacén centralizado, todas las centrales nucleares tienen ya Almacenes Temporales Individualizados (ATI) o planes para construirlos. En ese marco general, Ecologistas en Acción y el Movimiento Ibérico Antinuclear consideran que lo más sensato sería proceder al cierre de centrales nucleares ("al terminar sus permisos actuales") y abrir un debate "técnico, ciudadano y político sobre la gestión de los residuos que permanecerán radiactivos durante miles de años".
En tanto en cuanto se concreta ese calendario, los ecologistas consideran en todo caso que "la suspensión de este cementerio nuclear se encamina en la buena dirección del necesario cierre de todas las instalaciones nucleares y la elaboración de un nuevo plan de gestión de los residuos radiactivos".