El Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) trabaja, a través de la Subdirección de Dominio Público Hidráulico e Infraestructuras de la Dirección General del Agua, y en colaboración con los organismos de cuenca, en una aplicación informática del registro de aguas para el control y monitorización de las centrales hidroeléctricas y los aprovechamientos de aguas. Según informa Europa Press, los objetivos de este sistema pasan por 1) permitir una "gestión dinámica" de los datos de estos aprovechamientos, 2) la automatización de los certificados con validez legal, 3) la agilización de las entradas, modificaciones y salidas de inscripciones en el Registro de Aguas, 4) la permanente actualización del mismo y 5) la localización geográfica de las captaciones y usos del agua.
Estará integrado, según el Ministerio, por "elementos e información de carácter alfanumérico y cartográfico, referidos a las características del aprovechamiento de aguas (características del derecho, captación y uso) y a su descripción; y elementos de carácter documental que contendrán la imagen del título administrativo o judicial que otorgue o reconozca el derecho". Y "se tratará de un registro telemático que permitirá mantener actualizada la información y garantizará el acceso inmediato a la misma y a valorar la legalidad de los derechos al uso del agua". Sin embargo, no será operativa hasta el primer semestre de 2023.
Controlar las concesiones
Este paso es la respuesta que da el Gobierno al portavoz de Transición Ecológica de Unidas Podemos, Juantxo López de Uralde, sobre su promesa de impulsar un registro público y accesible de estas concesiones. Uralde señalaba que en julio de 2019 el Miteco "lametaba no contar con un registro público donde consultar la caducidad de las concesiones, y que preparaba uno con vistas a tenerlo listo en dos años". Transcurrido ese plazo, todavía no existe un registro público para consultar dicha caducidad. El portavoz de Unidad Podemos defendía además que la falta de este registro "impedía el control de la caducidad de concesiones, facilitaba ampliaciones en las mismas frente al cambio de sus condiciones de explotaciones, un nuevo concurso o, directamente, su reversión para su gestión pública", como en el caso de la presa de Ricobayo (Zamora).
Y es que el caudal de esta explotación, cuya concesión caducaba en 2010 pero fue ampliada en 1990 sin que se publicara en ningún boletín oficial, fue vaciado por Iberdrola este verano para maximizar los aprovechamientos, en plena crisis de precios, y despertó las críticas de autoridades municipales, autonómicas y del propio Gobierno, motivando un endurecimiento de la normativa sobre estos recursos.
El Miteco añade a su respuesta a Uralde "que los organismos de cuenca ya llevan un Registro de Aguas en las que inscriben de oficio las concesiones, incluidas aquellas para la producción de energía eléctrica, y los cambios autorizados para su titularidad o sus características". Estos registros, añade, "tienen carácter público y es posible solicitar del organismo de cuenca las certificaciones sobre su contenido". En todo caso, también informa que , el Ministerio trabaja en la elaboración de la citada aplicación informática del Registro de Aguas, como un sistema de información.