En octubre se cumplirá un año del desembarco de Yingli Solar en España. Tiempos revueltos para la fotovoltaica que, en España y en todo el mundo, se ve zarandeada por la inestabilidad regulatoria y las tensiones en los mercados. La sobrecapacidad de producción está, según los analistas, en el origen de estas tensiones. A finales de julio los fabricantes solares europeos lanzaban la iniciativa EU ProSun, por la que solicitan a la Comisión Europea que investigue “las supuestas prácticas de comercio desleal de los fabricantes chinos”. La respuesta de Yingli no quiere dejar dudas. “Absolutamente no. Ni vendemos a precios por debajo del coste de producción, ni recibimos subsidios ilegales del gobierno chino”, apuntan desde Yingli Europe, que tiene su sede en Alemania.
Ajustar los precios de los paneles a las decrecientes tarifas del mercado es, en todo caso, un gesto razonable para cualquier empresa que no quiera perder ese mercado. “Si bien es cierto que no todos los fabricantes han podido llegar a esta tendencia de bajada de precios, en Yingli la economía de escala y la integración vertical sí nos han permitido hacerlo”, explica Fernando Calisalvo, director general de Yingli Solar España. “Y no es ningún plato de gusto para nadie leer noticias de empresas occidentales que abandonan el sector. Pero es justo mencionar que también hay fabricantes asiáticos en esta situación”.
Lo de la economía de escala es un hecho: a finales de este año Yingli dispondrá de una capacidad de producción de 2,8 GW. Algo que pocas empresas pueden decir. Y lo de la integración vertical es estrategia empresarial, porque la línea de negocio abarca toda la cadena de valor fotovoltaica, desde la producción de polisilicio hasta la de células solares y el ensamblaje de módulos.
Fue en 1998 cuando el hoy presidente y director general de la compañía, Liangsheng Miao, fundó Yingli Green Energy, más conocida por la marca con la que comercializa sus productos, Yingli Solar. Desde entonces, esta empresa china con sede en Baoding ha protagonizado una carrera meteórica, con más de 4 GW instalados en todo el mundo y una facturación global que en 2011 llegó a los 2.332 millones de dólares.
La totalidad de su producción se realiza en cuatro fábricas en China: Baoding, Hainan, Tianjin y Hengshui. Pero la presencia de Yingli se extiende por todos los rincones del planeta con 21 filiales y sucursales en China, Alemania, España, Italia, Francia, Grecia, Turquía, Estados Unidos, Singapur, Japón y Australia. Además tiene tres centros de I+D y postventa en China, Estados Unidos y España. El de nuestro país cuenta con más de 14.000 metros cuadrados en el municipio madrileño de San Agustín de Guadalix.
Esa visión global se traduce en un afán constante por cumplir con las certificaciones internacionales de responsabilidad social, de gestión ambiental, de huella de carbono o de seguridad y salud ocupacional. Un detalle: Yingli Solar fue la primera empresa china en formar parte de PV Cycle, la asociación que promueve la recogida y el reciclado de módulos fotovoltaicos al final de su vida útil.
A principios de año Yingli anunciaba uno de esos contratos que sólo pueden hacer los fabricantes con músculo: el suministro de 180 MW, con opción de compra para 20 MW más, a la compañía alemana IBC Solar AG. Por las mismas fechas, la filial americana, Yingli Green Energy Americas, renovaba su acuerdo con el instalador solar sin ánimo de lucro GRID Alternatives por el que 800 familias de bajos ingresos de California y Colorado podrán disponer de electricidad solar. “Nuestra visión es hacer la energía solar asequible para todos”. Son palabras de Liangsheng Miao. Y no parece que se vayan a quedar solo en palabras.
Kits de autoconsumo
Yingli Solar ha puesto los ojos en el autoconsumo. Están convencidos de que, más pronto que tarde, será una opción rentable para el usuario. “Y entonces será imparable por más que algunos se resistan”. La empresa trabaja sobre un producto estandarizado que incluye todos los componentes necesarios para que una residencia o una industria pueda tener su kit fotovoltaico, una solución completa.
“Hemos alcanzado acuerdos con suministradores, instaladores y distribuidores. Y estamos preparados para formar a nuestros clientes. Entendemos que para este tipo de instalaciones nuestro cliente debe despreocuparse de la gestión con los diferentes suministradores, gestión de garantías, etc. Queremos facilitarle la solución total en cuanto a equipamiento se refiere. Nuestro cliente debe focalizarse en vender e instalar. Creemos que por inercia, por magnitud de empresa, Yingli puede ofrecer un producto líder y asequible”, explica Fernando Calisalvo.
Y lo creen a pies juntillas, incluso aunque la regulación del balance neto no sea la mejor posible. “A pesar de todo, los kits de autoconsumo de Yingli merecerán la pena. En los casos prácticos que estamos desarrollando ya, sin balance neto y, por tanto, sin verter a la red, cuando la curva de consumo y de producción coinciden en el tiempo, las cifras ya salen. Por ejemplo, para clientes con consumos estables en horario diurno”.
Luis Contreras, director técnico de Yingli Solar España, insiste en que “los números salen cuando consumes toda la producción de tu sistema de autoconsumo. Lo que es más difícil de conseguir, de momento, es rentabilizar un sistema para cubrir el 100% de la potencia contratada. Cosa que podría alcanzarse con la regulación del balance neto. Pero si tienes 300 kW contratados e instalas 50 kW vas a aprovecharlo a tope. Esa energía te puede salir ya con muy buen precio”.
Locos por el fútbol
Ligar cualquier marca al fútbol es el sueño de las grandes empresas. No en vano, pocas cosas despiertan tantas pasiones. Y últimamente lo sabemos bien en España. Yingli Solar lo ha visto claro y lleva años apostando fuerte. Muy fuerte. Fue la primera empresa china y la primera compañía de renovables en patrocinar el Mundial de Sudáfrica 2010. Y lo ha vuelto a hacer. La próxima gran cita será el Mundial de Brasil de 2014. Y el estadio de Maracaná, en Río de Janeiro, uno de los lugares míticos de la historia del fútbol, acogerá la final cubierto de paneles fotovoltaicos de Yingli. Sobre las cabezas de 82.238 espectadores habrá un anillo fotovoltaico formado por 1.500 módulos multicristalinos.
Yingli Solar anunció en mayo un acuerdo con Light ESCO, EDF Consultoria y el Estado de Río de Janeiro para que Maracaná se convierta en productor de energía solar. “Esta oportunidad de suministrar energía solar al estadio más famoso de Brasil y trabajar con dos de los líderes destacados en generación de electricidad y energía solar del país sólo se presenta una vez en la vida,” dijo entonces Liangsheng Miao, presidente y director general de Yingli Green Energy. “Brasil es un mercado emergente importante para Yingli y vamos a seguir aumentando nuestra presencia aquí mientras que el potencial de la energía solar del país crece”.
Pero el Mundial no es la única conexión de Yingli con el fútbol. Junto con la FIFA –la federación internacional de este deporte– desarrollan una campaña que denominan Football for Hope, Energy for Hope, para suministrar tecnología solar a una veintena de centros deportivos en zonas desfavorecidas de África. Además, patrocina al Bayern de Munich y a la selección nacional de Estados Unidos, siempre con la vista puesta en promover campañas que fomenten el deporte y la integración entre quienes lo tienen más difícil.