La desinformación ha causado mucho daño al autoconsumo, se quejan -con razón- muchos empresarios del sector. Porque sigue habiendo mucha gente que cree que el autoconsumo es ilegal, que está prohibido, que es carísimo, o que está gravado con un impuesto al Sol que poco menos que puede llevarnos a la ruina. La prensa generalista ha participado en muchos casos en el concierto (desconcierto) de la desinformación. Y el resultado es que muchos potenciales clientes del autoconsumo no se han acercado siquiera a preguntar porque creen -maldito círculo vicioso- que "el autoconsumo es ilegal, está prohibido, es carísimo o que hay que pagar un impuesto al Sol que se come todos tus ahorros y al final sales perdiendo".
Además, es verdad que hay un impuesto al Sol, lo cual parece confirmar ciertas dudas. En realidad, el impuesto no aplica sobre las instalaciones de menos de diez kilovatios de potencia (que son las que le valdrían a una vivienda familiar) y no aplica tampoco por ejemplo en Canarias. Allí se liberaron de él gracias al diputado Pedro Quevedo, que le arrancó ese compromiso al Gobierno en la negociación sobre los Presupuestos Generales del Estado: "si quieres mi voto afirmativo a tus presupuestos, Mariano, libérame del impuesto...". Y Rajoy lo liberó, dejando en mal lugar así a PNV, Coalición Canarias y Ciudadanos, que también dieron su sí a los PGE, pero no a cambio de romper esas cadenas.
Hacer virtud de la necesidad
El caso es que la ola de calor, que tantos inconvenientes produce, podría estar siendo revertida en forma de energía limpia si el Ejecutivo no hubiese intoxicado a la sociedad difundiendo mensajes como el de la insolidaridad del autoconsumo (¡!)-; podría estar siendo revertida en forma de energía limpia (la ola de calor) si el Ejecutivo promoviese -vía subastas- la instalación de nueva potencia termosolar; podría estar siendo revertida en forma de energía limpia si el Ejecutivo no hubiese congelado hace cinco años todo un sector, al que le retiró primero -retroactivo- las ayudas comprometidas (o reaccionario); y le impuso después impuestos (7%) para debilitarlo aún más.
Sí, la oferta (de energía solar) se ajusta como un guante hecho a medida a la demanda (de aire acondicionado)
Porque la tenemos (tenemos energía solar) justo cuando más la necesitamos (para fabricar con ella aire fresco, acondicionado). Además, es energía limpia y, en el caso del autoconsumo, energía propia, o sea, electricidad que el usuario no ha de adquirir a nadie. La Agencia Estatal de Meteorología prevé hoy máximas de 40 y 41º centígrados en las provincias de Sevilla y Badajoz respectivamente. Mañana la previsión de Aemet sitúa la temperatura máxima en Granada (40ºC) y Córdoba (41ºC). En tanto en cuanto regresa la sensatez a la política energética (o al menos una mínima sensatez), la asociación Asgeco "anima a los consumidores a actuar de manera responsable en el uso del aire acondicionado".
Estos son los consejos que ofrece la asociación de consumidores Asgeco para combatir de manera eficiente el calor
• Instalar toldos en las ventanas y acristalamientos donde alcanza el sol. Esta medida permitirá ahorros de energía de aproximadamente un 30%, dependiendo de la orientación de la vivienda o habitación.
• Usar ventilador, ya que el movimiento de aire da una impresión de descenso de temperatura de hasta 5ºC.
• Situar el aparato de aire acondicionado en el lado sombreado del edificio o protegerlo del sol y asegurarse de que no interrumpe el flujo de aire.
• No regular la temperatura demasiado baja: la temperatura ideal es de 25ºC (una diferencia de temperatura con el exterior superior a 12º no es saludable), cada grado menos supone un incremento del consumo entre un 5 y un 10%.
• Limpiar periódicamente los filtros de aire y vigilar el mantenimiento del equipo: esta medida contribuirá a un menor consumo del aparato y a mantener la estancia libre de gérmenes.
• Desconectar el aire acondicionado cuando no haya nadie en la habitación.
• Evitar abrir puertas y ventanas para ventilar cuando el aparato está en funcionamiento (mejor hacerlo en las primeras horas de la mañana o durante la noche, con el aire acondicionado apagado) y mantener alejado el termostato de las fuentes de calor, como lámparas y radiación directa del sol.
Asgeco recuerda por otra parte a los consumidores que "los aparatos de aire acondicionado han de llevar obligatoriamente una etiqueta de clasificación energética". Los de clase A+++ pueden consumir hasta un 40% menos. La asociación aconseja elegir los aparatos que ofrecen funciones añadidas como la discriminación horaria, el encendido y el apagado a una hora determinada, los sensores de presencia, los modos Eco o Night y otras muchas, que permiten que el aparato no desperdicie energía. Asgeco avisa por fin a la ciudadanía de que "la instalación de aparatos de aire acondicionado en las fachadas de los edificios puede necesitar de la información previa de la comunidad de vecinos o de una autorización oficial según unas ordenanzas municipales".
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