Los módulos bifaciales se han convertido en una tecnología fotovoltaica madura. Gracias a su bajo efecto LID (degradación inducida por la luz) y su alta eficiencia, van camino de ser la última tendencia “y pronto se convertirán en el estándar”, explican desde LONGi.
En 2017, la compañía china fue uno de los primeros fabricantes en promover esta tecnología con su módulo bifacial Hi-MO2. En 2018, con tecnología de medio corte y celulas bifaciales, se lanzó Hi-MO 3. Y en 2019 se produjo la adopción generalizada de los módulos bifaciales, con el módulo Hi-MO 4 (alto voltaje) de 166 mm, un producto disruptivo en el mercado solar fotovoltaico. Ahora que la paridad de red está cada vez más cerca, este año ha lanzado el nuevo módulo bifacial Hi-MO 5, especialmente pensado para plantas fotovoltaicas a gran escala en todo el mundo.
Con un fuerte compromiso con la innovación, LONGi logró la producción masiva de módulos bifaciales con tecnología PERC en 2017. Desde entonces, los módulos bifaciales de la compañía se han instalado ampliamente en todo el mundo, desde un proyecto de 390 MW en Asuán (Egipto), hasta una planta de 224 MW en Georgia, (Estados Unidos).
La investigación interna de LONGi sugiere que la participación de los módulos bifaciales en el mercado seguirá creciendo. A medida que aumenta la producción (lo que significa más datos disponibles y un diseño mejorado), los costes adicionales que resultan de producir la parte posterior de un módulo bifacial pueden compensarse con la reducción del coste de la energía producida (LCOE) y la mejora de la rentabilidad.
El módulo Hi-MO 5 (oblea estándar M10) hizo su debut en junio de 2020. Esta nueva gama de módulos de alta potencia está diseñada para plantas de gran tamaño, con una potencia máxima de 540 W y una eficiencia del 21,1%, “es capaz de ofrecer el máximo rendimiento y una fiabilidad a largo plazo”, explican desde LONGi.