Se explica en un comunicado que la planta está ubicada en la provincia de Chiriquí, a unos 3 km de los otros proyectos solares que Enel Green Power tiene en operación en la zona (Caldera, de 5 MW, y Sol de David, de 8 MW).
El nombre de la planta proviene de la comunidad donde se emplazará y “corresponde a la segunda etapa del proyecto que comprende Jagüito (13 MW) y Esperanza (26 MW), que iniciaron construcción en 2020 en las provincias de Coclé y Chiriquí respectivamente”, se agrega. Todas las plantas mencionadas entraron en operación comercial en 2017.
La planta comprenderá más de 68 mil paneles de 455 W cada uno, ocupará un área de 33 hectáreas y contendrá 754 estructuras de montaje. Además, tendrá una línea de conexión de 34,5 kV que se extenderá unos 4 km desde Madre Vieja hasta la subestación Progreso, propiedad de la Empresa de Transmisión Eléctrica (ETESA).
El periodo de construcción se estima llevará ocho meses, con inicio de inyección de energía a la red en diciembre de 2021 y de operación comercial en febrero de 2022.
Incluyendo Madre Vieja, Jagüito y Esperanza, Enel Green Power alega sumar una inversión total de 130 millones de dólares en proyectos solares en Panamá. La empresa se declara pionera en generación fotovoltaica en el país centroamericano con la construcción de la planta Chiriquí en 2015; en la actualidad afirma mantener una posición como el generador más grande del país en esta tecnología, con una capacidad instalada de 62 MW.