La historia nos la ha contado Krannich Solar, la distribuidora de material fotovoltaico de la que se ha surtido Solar del Valle. Y Energías Renovables ha querido compartirla hoy aquí. Porque el autoconsumo solar (instalar placas solares para que produzcan energía eléctrica y consumir nosotros mismos esa electricidad) es una solución de ahorro objetivamente beneficiosa para todos. Para empezar, porque el autoconsumo no solo ahorra dinero al propietario de la instalación y malos humos a todo el vecindario (kilovatio hora que produces con el Sol, kilovatio hora que no tienes que producir quemando gas natural o carbón), sino que, además, a veces... va más allá. Y esta es, simplemente, una de esas veces.
Que nos ahorremos cualquiera de nosotros 11.900 euros es maravilloso. Que se lo ahorre una Fundación como la susodicha es, sencillamente, mejor. Por la labor que desarrolla.
Por su incalculable valor.
Krannich, además, ha enviado una nota de prensa que cala (enhorabuena).
Bien traída.
Bien hecha.
Empieza así: “la normalización y la integración dentro del modelo energético del autoconsumo fotovoltaico son valores que llevan por bandera la distribuidora Krannich Solar y su socio Solar del Valle. Como también lo son la normalización e integración en la sociedad de las personas con diversidad intelectual para la Fundación Prode”.
Bien traído.
Bien hecho.
En octubre de 2015, el primer Gobierno Rajoy instituyó un impuesto -al Sol- que ralentizó la penetración en España del autoconsumo. Todo el sector sabía que tarde o temprano la sinrazón acabaría embarrancando. Y así sucedió. Por el camino, sin embargo, y lamentablemente, quedaron muchas instaladoras, pequeñas ingenierías y pymes que no pudieron aguantar el frío desierto artificialmente construido por el legislador.
Tres años después de aquello, en octubre del 18, un nuevo legislador derogó el impuesto al Sol y empezó a desliar los muchos nudos (técnicos y administrativos) que su antecesor había ideado para frenar el desarrollo de esta solución de ahorro. El resultado primero han sido 459 megavatios de autoconsumos instalados en 2019… y proyectos como el de Prode, una fundación andaluza que trabaja por mejorar la vida de personas con diversidad intelectual y por promover su inserción laboral, una fundación que, además, ahora podrá disponer cada año de 11.900 euros más.
Luis Navero, responsable de Desarrollo de Negocio de Solar del Valle: “la instalación, que ha sido incentivada por el Programa para el Desarrollo Energético Sostenible de Andalucía, no solo ayuda a reducir el consumo de la red eléctrica y, por consiguiente, el gasto en electricidad, en unos 11.900 euros al año, sino que también ayuda a mejorar la eficiencia energética en los distintos inmuebles de la fundación”
Además -añaden desde Krannich-, la instalación ha quedado perfectamente integrada en la cubierta del edificio. Lo explica Julia Machmud, la responsable comercial de esta distribuidora en la zona sur: “una de las peculiaridades de este sistema es la perfecta integración arquitectónica de los módulos fotovoltaicos y el óptimo aprovechamiento de toda la cubierta disponible, tanto en las zonas planas como en las inclinadas”.
La instalación ejecutada por Solar del Valle cuenta una potencia de 87,13 kilovatios. La ingeniería cordobesa calcula que producirá unos 133.700 kilovatios hora cada año, producción que estima evitará la emisión de 54 toneladas de CO2 cada año, “lo que equivale a plantar 2.300 árboles”.
La distribuidora fotovoltaica Krannich Solar ha sido la encargada de suministrar los paneles solares de la marca Axitec y los inversores fotovoltaicos de la familia Sunny Tripower de SMA. Krannich Solar España es la división española de Krannich Solar, distribuidora alemana de componentes para instalaciones fotovoltaicas fundada en 1995 por Kurt Krannich.
Con más de 30 años de trayectoria, Solar del Valle es una empresa cordobesa especializada en el desarrollo de proyectos de energía solar y climatización eficiente. Sus soluciones en ingeniería térmica y fotovoltaica abordan todas las fases de proyecto: proyectos llave en mano; ingeniería; construcción e instalación; asesoramiento y tramitación de subvenciones; suministro e instalación de equipos; tramitación administrativa de la instalación; puesta en marcha; servicios posventa; operación y mantenimiento; y gestión de servicios energéticos.
Fundación Prode es una “organización sin ánimo de lucro que nace en 1984 con el reto de generar calidad de vida, bienestar y felicidad para cada persona con discapacidad intelectual y sus familias”.
Estos son sus principios
«Todas las personas que integramos Fundación PRODE, usuarios, familias, trabajadores, voluntarios, etc., luchamos codo con codo para seguir avanzando hacia la igualdad real de derechos para todos/as, sin exclusión. Nuestro gran objetivo es alcanzar el mayor grado posible de inclusión social, y que cada persona con discapacidad y/o en situación de dependencia tenga las oportunidades y recursos necesarios para ser feliz.
Para nosotros, las personas son lo único y más importante. Son el núcleo que da vida a nuestra razón de ser, y no queremos que nadie se quede atrás. Luchamos desde el compromiso ético para salvaguardar nuestra dignidad en el seno de una sociedad justa y solidaria».
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