De acuerdo con un comunicado difundido por Prodiel, será el parque fotovoltaico de mayor potencia que la compañía ha ejecutado hasta el momento en Chile. Se afirma que el alcance del contrato incluye, además de la construcción del parque, una subestación elevadora de 220/33kV, una ampliación de subestación de maniobra de 220 kV y una línea de alta tensión de 1,7 km de longitud por donde se evacuará la electricidad generada a la red.
En agosto pasado se supo que Atlas Renewable Energy firmó un contrato de compraventa de energía de largo plazo (PPA, por sus siglas en inglés) con Engie Energía Chile para el suministro de 550 GWh/año por un período de 15 años a partir de lo generado por Sol del Desierto, cuyas obras ya están en marcha, y se espera que, cuando entre en operaciones en el primer trimestre de 2021, sea una de las plantas solares más grandes del país.
La planta estará formada por más de 580.000 módulos fotovoltaicos repartidos en una superficie de 445 hectáreas, en terrenos concesionados del Ministerio de Bienes Nacionales. Se prevé que produzca 724 GWh al año, equivalente al consumo energético de más de 228.000 hogares chilenos y a un ahorro de emisiones de CO2 120.000 toneladas anuales.
Prodiel declara alcanzar con este proyecto 948 MW construidos en el país.
Por su parte, Atlas Renewable Energy pertenece al grupo inversor, basado en Londres, Private Equity Investor ACTIS, con más de 20 años invirtiendo en mercados emergentes y más de 18 GW de capacidad instalada.
La compañía desarrolla, financia, construye y opera activos de energías renovables en Latinoamérica, con 800 MW solares en operaciones en Uruguay, Brasil y México. En Chile desarrolló Quilapilún (110 MW), la primera central fotovoltaica a gran escala en la región Metropolitana, inaugurada en 2017, ubicada en la comuna de Colina.