La fabricación de esta primera plataforma WindFloat fue culminada con éxito la semana pasada en Fene (Ferrol). La plataforma ha sido amarrada al muelle de esa localidad gallega, donde comenzó ayer la maniobra de instalación del aerogenerador. La conexión de ambos extremos -aerogenerador y plataforma- y las tareas de preparación para abordar las operaciones marinas que vengan a continuación tendrá lugar a lo largo de las próximas semanas. WindFloat es un desarrollo tecnológico de Principle Power, compañía que estima que su plataforma flotante (con el aerogenerador sobre ella) podrá partir de puerto rumbo a su ubicación final, mar adentro, a finales del verano. El ingenio eólico quedará situado finalmente a unos veinte kilómetros de la costa de Viana do Castelo, al norte de Portugal, y a unos treinta kilómetros de la frontera con Galicia. La plataforma flotará sobre aguas cuya profundidad alcanza los cien metros y donde el recurso eólico -informa Principle Power- es abundante.
El proyecto pertenece al consorcio Windplus, que es propiedad conjunta de EDP Renováveis (54,4%), Engie (25%), Repsol (19,4%) y Principle Power Inc (1,2%). Las tres turbinas eólicas que integrarán el parque serán subidas a otras tantas plataformas flotantes que quedarán ancladas al lecho marino. En total, el parque contará con una potencia de veinticinco megavatios (25 MW), capacidad suficiente -según los promotores- como para generar la demanda anual de electricidad de 60.000 hogares. Windplus asegura que las soluciones que ha desarrollado son más baratas que las que está empleando ahora mismo el sector eólico marino. ¿Por ejemplo? El consorcio ensambla la turbina en la plataformaa en tierra firme, en el propio puerto, con grúas convencionales (no especiales). ¿Otro ejemplo? Windfloat es capaz de llevar su plataforma hasta su destino mar adentro con remolcadores convencionales (otras compañías del sector lo hacen con navíos específicamente construidos para ello).
El proyecto -informa Principle Power- es apoyado por entidades públicas y privadas y ha atraído inversores de mercados líderes, así como financiación de la Comisión Europea (a través del programa NER300), el Gobierno de Portugal (no así el español) y el Banco Europeo de Inversiones. Según el comunicado que ha difundido el consorcio promotor, entre los suministradores que han hecho posible WindFloat se encuentran Principle Power, Navantia/Windar Joint Venture, A.Silva Matos Group y Bourbon. El fabricante euroasiático de aerogeneradores marinos MHI Vestas ha suministrado las turbinas y JDR Cables ha hecho lo propio con los cables dinámicos.
Antecedentes
El proyecto WindFloat 1 abarcó el diseño y la construcción de una unidad de demostración, utilizando una turbina comercial de dos megavatios (2 MW). La unidad (foto) se instaló frente a la costa portuguesa, cerca de Aguçadoura, y fue conectada a la red a finales de diciembre de 2011. Según EDP, el proyecto, que constituyó "el primer despliegue eólico en alta mar en todo el mundo que no requirió del uso de equipos de carga pesada mar adentro, supuso la instalación de la primera turbina eólica en el Atlántico en aguas abiertas". La WindFloat 1 funcionó durante cinco años con una alta disponibilidad, produciendo más de 17 gigavatios hora y sobreviviendo a olas de hasta siete metros de altura. Después de alcanzar con éxito el final de la vida útil de la primera fase del proyecto, la WindFloat 1 fue desmantelada con un impacto insignificante para el medio ambiente.
Segunda etapa
El siguiente paso en el desarrollo de la tecnología WindFloat será la fase precomercial, con dos proyectos que ya están en desarrollo y cuyo objetivo es -explican desde EDP- demostrar "el bajo perfil de riesgo y la competitividad económica de la tecnología para preparar el camino a los futuros parques eólicos flotantes de tamaño comercial". El primero de esos proyectos se aprobó en 2016, en Francia, con cuatro plataformas que utilizan turbinas de viento de 6 MW, instaladas sobre la plataforma WindFloat. El proyecto de los parques eólicos flotantes del golfo de León (Éoliennes Flottantes du Golfe du Lion, EFGL) está siendo desarrollado por Engie, EDP Renovables y Caisse des Dépôts y debería estar operativo en el 2020.
El segundo es el que nos ocupa, WindFloat Atlantic (WFA), instalación a ubicar frente a la costa portuguesa de Viana do Castelo, en aguas con una profundidad de cien metros.El Banco Europeo de Inversiones (BEI) concedió en octubre de 2018 un préstamo de 60 millones de euros a Windplus SA, una filial de EDP Renováveis, Engie, Repsol y Principle Power Inc. El préstamo de 60 millones de euros financiará el parque eólico flotante con el respaldo de la iniciativa InnovFin para proyectos de demostración energética, que recibe financiación en el marco del programa de investigación y desarrollo de la UE, Horizonte 2020. Además, el proyecto recibirá 29,9 millones de euros del programa NER300 de la UE y hasta 6 millones de euros del Gobierno de Portugal a través del fondo portugués para la reducción de las emisiones de carbono (Fundo Português de Carbono).
Los padres de la idea: Principle Power
Constituido en 2007, Principle Power se define como "proveedor de desarrollo, tecnología y servicios para el sector de la energía eólica marina". Su tecnología WindFloat -un cimiento flotante para aerogeneradores- hace posible el establecimiento de parques eólicos marinos temporales o en aguas profundas. Principle Power tiene oficinas en Estados Unidos, Francia y Portugal, comercializa WindFloat como una solución tecnológica y actúa como proveedor de servicios orientados a promotores, productores energéticos independientes y empresas de suministros públicos en el cambiante mercado internacional de la energía eólica marina.