La comparecencia de Ribera se produce a solicitud de los Grupos Plural y Mixto, para quienes estos planes no atienden a las demandas de los principales sectores afectados, como el pesquero, y no cuentan con los informes necesarios sobre el impacto socioeconómico ni medioambiental, ni con la grave afectación que supondrá para la flota pesquera y los espacios marinos. El Gobierno, por el contrario, afirma que los Planes de Ordenación del Espacio Marítimo son un instrumento estratégico transversal que permite el aprovechamiento óptimo del espacio marítimo, reduciendo conflictos y potenciando coexistencias y sinergias (esta es la primera vez que España aborda una planificación de estas características). Los planes han sido sometidos a una Declaración Ambiental Estratégica, que publicó Transición Ecológica a finales del pasado mes de diciembre y que, entre otras cosas, prioriza la pesca de arrastre en detrimento del desarrollo de parques eólicos marinos. Además, del millón de kilómetros cuadrados ordenados, solo son susceptibles de acoger la instalación de aerogeneradores marinos algo menos de 5.000 kilómetros cuadrados (menos pues del 0,5% del total).
El Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico sostiene que los planes, que estarán vigentes hasta el 31 de diciembre de 2027, garantizan la protección de los ecosistemas, hábitats y especies sensibles y vulnerables, incluidos los protegidos por normativa autonómica, nacional o supranacional. En concreto, la planificación afecta a las cinco demarcaciones marinas: noratlántica, suratlántica, del Estrecho y Alborán, levantino-balear y canaria.