"El fortalecimiento de la cooperación regional ayudará a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorará la seguridad de suministro en la región. Esos son los objetivos clave de la Unión de la Energía". La Comisión Europea ha difundido un comunicado que arranca en esos términos -"esos son los objetivos clave"- y en el que recoge el acuerdo que han suscrito esta semana, en materia de energía eólica marina, nueve gobiernos: Bélgica, Dinamarca, Francia, Alemania, Irlanda, Luxemburgo, Holanda, Noruega y Suecia. El acuerdo, que ha sido firmado por el vicepresidente para la Unión de la Energía, Maroš Šefčovič, y el comisario de Acción por el Clima y la Energía, Miguel Arias Cañete, constituye "un paso importante -ha dicho Šefčovič- en el proceso de construcción de la Unión de la Energía, un paso que ayudará además a la consecución de los compromisos climáticos adquiridos en París el año pasado". El estrechamiento de los lazos de cooperación regional -ha concluido el vicepresidente de la Unión de la Energía- será "esencial" para aprovechar, "al menor coste", todo el potencial energético que entrañan los recursos presentes en el mar del Norte. El comisario de Acción por el Clima y la Energía, Miguel Arias Cañete, ha aprovechado para insistir por su parte -y como es habitual- en las interconexiones: "esta estrategia impulsará las interconexiones -ha dicho- y la potencia renovable ayudará a combatir el cambio climático y reforzará la seguridad energética, que son los objetivos centrales de la Unión de la Energía". [Sobre las interconexiones, incluimos varios artículos relacionados más abajo].
La cooperación se centrará en cuatro áreas
- la planificación espacial debe ser optimizada, dado el uso intensivo del mar del Norte. Así, los firmantes se comprometen a compartir todo tipo de datos e información, trabajar conjuntamente en materia de medio ambiente y coordinar los procedimientos de autorización de proyectos;
- la red eléctrica deberá ser desarrollada para que sea posible la integración de grandes parques eólicos marinos. Paralelamente, los mercados deberán quedar conectados para permitir el flujo eléctrico cuando y donde sea necesario. El trabajo, a escala regional, en este campo deberá incluir la planificación y desarrollo coordinado de la red, al mismo tiempo (dice el acuerdo) que se exploran potenciales sinergias con los sectores marinos de extracción de petróleo y gas.
- los países que se unan a esta iniciativa en el futuro deberán compartir información acerca de las necesidades de sus infraestructuras marinas. Ello ayudará a planificar las inversiones y, así mismo, será positivo para los mecanismos y modelos de apoyo al sector y para movilizar inversiones en proyectos conjuntos.
- el objetivo -explica el acuerdo- es identificar las mejores prácticas y vías de armonización de normativas y patrones en toda la región. La cooperación también conducirá a la reducción de costes en toda la cadena de valor. En aras de ese objetivo, los países firmantes trabajarán en el mutuo reconocimiento de los patrones nacionales.
Ahorro multimillonario
Según el comunicado difundido por la Comisión Europea (CE), estudios de la propia Comisión han mostrado que el desarrollo conjunto y coordinado de la red de evacuación de la energía eólica marina en el mar del Norte puede traducirse en un ahorro (potencial) de 5.100 millones de euros. Ello sería debido a, entre otras cosas, una menor necesidad de cableado de conexión de las instalaciones eólicas marinas con el continente (fewer and shorter cables being required to connect offshore wind installations to land). La CE también prevé "beneficios evidentes" si hay integración de mercados y una mayor cooperación en materia de medio ambiente marino. El acuerdo "permanece abierto a la participación de todos los países con intereses en el mar del Norte".
Political Declaration on energy cooperation between the North Seas Countries
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