Durante 2019 se instalaron en México 1.284 MW, en Argentina 931 MW y en Brasil 745 MW. El informe señala que "sin embargo, las perspectivas para la energía eólica en los próximos dos o tres años en algunos de estos mercados, a saber, Argentina y Brasil, se ven amenazadas por desafíos regulatorios y políticos". Debe agregarse que en México también hay mar de fondo, ya que pocos días atrás se supo que la Asociación Mexicana de Energía Eólica (Amdee) advirtió que hace falta certidumbre en las decisiones políticas para asegurar la continuidad expansiva del sector.
Respecto de México y Argentina, el presidente del Comité de América Latina de GWEC, Ramón Fiestas, analizó que esos países corren el riesgo de perder el impulso debido a "la cancelación de las subastas planificadas y los cambios en el esquema de créditos de energía limpia en México en 2019, así como los cambios políticos y económicos en Argentina que conducen a la incertidumbre para futuras subastas".
Debe mencionarse que entre los países más activos en la instalación de capacidad eólica figura Chile, con 526 MW de nueva planta. Colombia también es mencionada como un mercado promisorio gracias a la ejecución con éxito de su primera subasta de energía renovable en octubre pasado.
Si se toma en conjunto América Central, América del Sur y el Caribe, el informe puntualiza que las nuevas incorporaciones de capacidad disminuyeron en un 5 % en comparación con 2018. "En general -se explica-, esto significa que la región ha triplicado sus instalaciones de energía eólica desde 2010, mostrando el inmenso progreso realizado por la energía eólica como fuente de energía líder en las Américas".
Actualmente, en todo el continente americano hay una capacidad instala de 148 GW eólicos.