La torre autoizable integra una pieza de transición que une la estructura marco y la torre tubular característica de cualquier aerogenerador. En el proyecto namibio, la pieza de transición distribuye la carga en tres puntos directamente anclados al subsuelo rocoso. Gracias a su diseño -explican desde Nabrawind-, esta solución produce un ahorro de hasta el 95% del hormigón que requiere cualquier solución convencional de anclado de la torre al suelo, lo que, según la empresa, equivale a evitar emisiones por valor de aproximadamente mil toneladas de CO2. "Consecuentemente -apuntan desde Nabrawind-, el diseño de esta nueva torre constituye una alternativa muy competitiva en aquellos parques eólicos en los que el suministro de hormigón puede convertirse en un problema". La empresa navarra se ocupará del suministro (diseño, fabricación y logística) de la torre y su base (que entregará en la costa de Namibia).
Este es el segundo proyecto que acometen conjuntamente Nabrawind y la franco namibia InnoSun Energy, que ya trabajan juntas en un proyecto en Marruecos que desembocará en la instalación en ese país de la mayor torre eólica de África (144 metros).