El 23 de diciembre se cumplió el plazo de presentación de iniciativas dentro de la “manifestación de interés orientada a identificar y localizar proyectos solventes con impacto para el reto demográfico y la lucha contra la despoblación”. Dicha manifestación de interés se basa en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia presentado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Mitecord).
Antes, el 18 de diciembre, la Junta de Castilla y León mostraba su apoyo al proyecto de Asfoso para presentarlo a la convocatoria del Mitecord. “Se trata de un proyecto que parte desde un escenario de crisis, como es la sanitaria, pero también la territorial, relacionada con la caducidad del modelo de producción maderero vigente, que provoca que los municipios con mayor patrimonio forestal no vean plasmada esta situación en sus economías”, se destacaba desde la Junta.
Según Asfoso “el proyecto parte de la capacidad que los espacios forestales tienen para generar empleo y riqueza, identificando tres pilares básicos de actuación: fomento de selvicultura, de la ganadería extensiva y de la agricultura de montaña”. A partir de estos pilares se plantea “una estrategia encaminada a que la puesta en valor de estos recursos se realice desde el ámbito local, fomentando la integración vertical de las cadena de valor, y en la que la digitalización adquiere un papel fundamental”.
Acciones de valorización de recursos naturales desde los espacios forestales
La implementación del proyecto se realiza a través de doce líneas de actuación, en cuyas dos primeras tiene una participación directa la biomasa. “Son acciones de valorización de recursos naturales que se realizan desde los espacios forestales, introduciendo un plus de innovación fundamentalmente relacionado con la digitalización y con las energías verdes, y añadiendo el extra encaminado a la transformación de productos desde el ámbito local”, explican desde Asfoso.
La primera línea de actuación es el apoyo a la creación de comunidades energéticas locales o supralocales basadas en la utilización de la biomasa forestal primaria (astilla y pélets). La propuesta de directiva europea al respecto define estas comunidades como "una asociación, cooperativa, sociedad u organización sin ánimo de lucro controlada por accionistas o miembros locales, generalmente orientada al valor más que a la rentabilidad, dedicada a la generación distribuida y a la realización de actividades de un gestor de red de distribución, suministrador o agregador a nivel local”.
Mejora de la eficiencia energética en viviendas, infraestructuras y edificaciones rurales
La segunda línea de actuación busca la mejora de la eficiencia energética de viviendas, infraestructuras o edificaciones rurales a través del empleo de recursos endógenos. Incluye la sustitución de calderas de gasoil por calderas de biomasa en viviendas rurales y la deequipos energéticos de explotaciones agroforestales basados en el consumo de gasoil por sistemas energéticos verdes”.
El resto de líneas tienen que ver con el impulso de la movilidad sostenible en el ámbito supralocal y turístico; fomentos de la selvicultura de base local, de la ganadería extensiva y de la agricultura de montaña; conectividad en áreas rurales; recuperación del patrimonio y difusión de proyectos culturales; manufactura, transformación y comercialización en el sector primario; acciones de transformación social en el ámbito agroforestal; conformación de una oferta conjunta de bienes y servicios y digitalización e interoperabilidad de la cadena de valor.
Presupuesto total de veinticinco millones de euros
Asfoso asegura que “cada una de las líneas de actuación dispone de su respectivo plan de desarrollo, conformando un presupuesto total de veinticinco millones de euros”. “En estos momentos desconocemos ni la manera en que, caso de ser aprobado el proyecto, este podría llegar a ser implantado, ni tampoco el porcentaje de subvencionabilidad que podrían llegar a alcanzar”, apostillan.
Para la Junta de Castilla y León, el proyecto da cumplimiento a cada uno de los cuatro ejes transversales que estructuran el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España: transición ecológica, transformación digital, igual de género y cohesión territorial.
También consideran que sus objetivos coinciden con los del Plan para la Recuperación en Castilla y León, como son la promoción de la cohesión económica, social y territorial; el fortalecimiento de la capacidad de recuperación orientada a la bioeconomía; mitigar el impacto social y económico de la crisis; y el apoyo a las transiciones verde y digital.