Distintas fuentes citan que esta pesquisa se abre a petición del Directorio Europeo de Biodiésel, y su objetivo sería el de imponer nuevos aranceles al biodiésel importado tanto de Argentina como de Indonesia, países que desde 2013 vienen bregando contra acusaciones de dumping.
En 2016, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) emitió un fallo por el que anuló la imposición de aranceles a las importaciones de biodiésel desde Argentina e Indonesia, alegados como derechos antidumping que estaban vigentes el año anteriormente mencionado.
Como consecuencia, el año pasado la Comisión Europea redujo los aranceles antidumping para el biodiésel argentino desde tasas iniciales de entre 22 y 25,7% a entre 4,5 y 8,1%. Así, en septiembre del año de 2017, Argentina volvió a exportar el biocombustible, que entre entonces y mediados del actual mes de enero ha colocado en el bloque europeo ventas que superaron las 560 millones de toneladas, en su mayoría destinadas a España y Holanda.
En otro contencioso, en este caso con Estados Unidos, el biodiésel argentino fue penalizado por el Departamento de Comercio (DoC) con un arancel promedio del 57%, elevado a principios de este mes al 72%.
