Los 143 megavatios puros actuales de biomasa de Ence se verán seguro ampliados por otros cuarenta procedentes de la subasta de energías renovables del pasado año, cuyo destino será con toda probabilidad la provincia de Pontevedra. Se mantienen más en el aire las dos plantas de Canarias que sumarían 140 megavatios. El informe desfavorable de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias supuso un revés para los planes de la compañía.
A la espera de lo que pueda deparar la próxima subasta de electricidad renovable con nuevas plantas, Ence anunció el pasado mes de diciembre que había cerrado “un acuerdo de compra de la participación de Endesa en las plantas de generación de energía renovable con biomasa de Enemansa (Ciudad Real) y de La Loma (Jaén), en las que la compañía mantenía un 68,4% y del 64,1%, respectivamente”.
175 millones de kWh año con orujillo
En el mencionado anuncio se afirma que “la operación permite a Ence aumentar en un 29% la potencia instalada de su negocio de energía (exclusivamente en plantas de biomasa), que pasa a alcanzar 143 MW”. La compañía mantiene también en funcionamiento los 77 megavatios de la fábrica de celulosa de Navia (Asturias) y los 35 de la de Pontevedra. Es decir, 255 megavatios.
Acorde a las cifras más recientes extraídas de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, Ence coparía casi la mitad de la capacidad instalada con biomasa sólida total en España, que alcanza los 517 megavatios.
Según detallan desde Ence, las plantas adquiridas a Endesa, que utilizan prioritariamente orujillo (biomasa derivada del tratamiento de la aceituna para extracción del aceite), alcanzarán una producción neta estimada de 175 millones de kWh en 2016. Añaden que “su EBITDA estimado se elevará a 5,6 millones de euros en 2016, por lo que contribuirán a reforzar la estabilidad de los resultados de Ence”.
