El quid de la cuestión radica en el artículo 3 de la orden del 20 diciembre de 2012 que revoca la anterior de 21 de abril de 2012, y que ahora tiene continuidad legal con la resolución publicada en el BOE de este sábado. Como ya ha contado varias veces este medio, en abril, al calor de la expropiación de YPF por parte de Argentina (principal exportador de biodiésel a España), el Gobierno aprobó la mencionada orden, que en su artículo 3, donde se clarifica los sujetos que pueden solicitar la asignación, citaba, textualmente: “los titulares de plantas o unidades de producción de biodiésel (…) que estén ubicadas en España o en otro Estado miembro de la Unión Europea, podrán solicitar la asignación de una cantidad anual de producción de biodiésel para el cómputo del cumplimiento de las obligaciones de biocarburantes”,
El 16 de octubre el ministerio publicó una orden que deja sin efecto la de abril, alegando razones de subida de los carburantes en el transporte, aunque muchos la ven como consecuencia de la presión de Argentina ante la propia UE y la Organización Mundial del Comercio para que no se llevara a efecto. Dos meses después se publica la nueva orden, con un cambio sustancial en el artículo 3, donde los sujetos que pueden solicitar la asignación son, en general, “los titulares de plantas o unidades de producción de biodiésel”. Se da a entender que no está supeditado a España y la UE, por lo que Argentina queda satisfecha con la nueva redacción y se procede a aprobar la resolución final de este sábado.
A Argentina le gusta la nueva orden
Desde la sección de Biocarburantes de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA), no entran a analizar este cambio, pero si valoran “positivamente la decisión del Ministerio de Industria, Energía y Turismo de convocar de nuevo el procedimiento de asignación de cantidades de biodiésel, tras la inesperada cancelación el pasado mes de octubre de la convocatoria inicial cuando estaba a punto de ser resuelta”. Manuel Bustos, director general de APPA Biocarburantes, añade que “dada su crítica situación económica, tras varios años sufriendo la competencia de importaciones desleales, la industria española productora de biodiésel espera que el Ministerio realice esta asignación de manera rápida y diligente, sin agotar el plazo máximo de seis meses legalmente previsto”.
APPA Biocarburantes no se pronuncia sobre la apertura de las cuotas de asignación a empresas de otros países. Mientras tanto, el gobierno argentino ha decidido retirar la demanda comercial presentada a la Organización Mundial del Comercio (OMC) contra la Unión Europea por la norma española que limitaba el acceso del biocombustible que procediera fuera de las fronteras comunitarias. De esta manera, da a entender que acepta la nueva orden.
Que se apruebe rápido y vale la documentación presentada
Según la resolución publicada el 9 de febrero en el BOE, las solicitudes para la asignación de cantidades de producción de biodiésel deberán presentarse en el plazo de treinta días desde dicha publicación. El listado de las cantidades asignadas, “a la vista de la documentación presentada y la complementaria que se pudiera precisar, se aprobará por resolución motivada del titular de la Secretaría de Estado de Energía” y se publicará en el BOE en un plazo que “no podrá exceder de seis meses computados desde que surta efectos la resolución de convocatoria del procedimiento”. Esto supone volver a presentar las solicitudes, algo que ya fue catalogado por APPA Biocarburantes como “un enorme esfuerzo económico, técnico y humano”, tanto en dicha presentación como para acondicionar las plantas de cara a la reactivación de la producción.
Sin embargo, la resolución tiene en cuenta este esfuerzo, y afirma que los titulares de aquellas plantas o unidades de producción que ya hubieran efectuado una solicitud de asignación deberán presentar una nueva, “si bien no estarán obligados a presentar la documentación ya remitida, según lo dispuesto en la disposición transitoria única de la Orden IET/2736/2012, de 20 de diciembre”. La solicitud no ocupa más allá de un folio y es la parte menos voluminosa de la documentación a aportar.
