Entre el 11 y 12 de mayo se ha celebrado en la sede de la entidad Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) la XII edición del congreso BioMeta, definido como “un encuentro de referencia mundial sobre estrategias de tratamiento de residuos urbanos que permitan aprovechar el biogás resultante como fuente de energía, entre otros usos”. En la presente cita se ha presentado el proyecto Methamorphosis, aprobado dentro de la convocatoria del programa LIFE de 2014.
En Methamorphosis participan como socios FCC-Aqualia, AMB, Gas Natural, el Institut Català d’Energia (Icaen) y el Centro Técnico de Seat. El objetivo de esta iniciativa es introducir cambios en el tratamiento de los residuos, tanto municipales como agroindustriales, para aumentar la producción de metano y una vez enriquecido se use como combustible para vehículos, favoreciendo la reducción de gases de efecto invernadero.
70% de reducción de demanda energética durante el proceso
Como se expuso en BioMeta, “la eficiencia del biometano enriquecido se demostrará con su uso en vehículos Seat, en una serie de pruebas de más de 120.000 km”. Además de conseguir un combustible “mucho más limpio que los hidrocarburos”, se destacó que “el proceso también permitirá que las instalaciones de tratamiento alcancen una alta eficiencia y un bajo nivel de contaminación, gracias a la reducción del 70% de la demanda energética requerida proceso y del 80% de emisiones de CO2 respecto a los últimos sistemas implementados”.
En España, al contrario que en otros países de Europa (Holanda, Suecia, Noruega o Suiza) o de Sudamérica, principalmente Brasil, el uso del biometano no se ha extendido entre el transporte y no pasa de la fase de investigación y de pruebas piloto como la que desarrollará Methamorphosis. Ejemplos de esa fase de investigación son otros proyectos, como AgroBiomet. El sector asociado al biogás y el biometano exige también, para que se produzca el salto comercial, un marco estable y claro que defina la inyección de este gas a la red y los vehículos.
Durante el congreso se recordó que “la legislación actual, con la modificación de primas para la obtención de energía a partir de residuos y los impuestos del combustible, complica la situación económica del sector”. AMB remarcó sus “líneas innovadoras para conseguir productos con un valor añadido, como los productos bioquímicos y bioplásticos”, con ejemplos que van desde bolsas de plástico hasta prótesis médicas con un coste mucho más asequible que las habituales.