He leído que el presidente de una gran empresa eléctrica dice que se puede ver obligado a cerrar alguna central de generación de electricidad, y pensé al momento que, dada la situación de exceso de capacidad de generación, (creada por esta misma empresa, entre otras, al construir más centrales de ciclo combinado de las necesarias por un grave fallo de previsión), no vendría mal al sistema eléctrico español que se cerrara alguna de las que nunca debieron haberse puesto en marcha. Si con el anuncio del cierre de centrales, este señor pretende presionar al Gobierno: ¡Menuda amenaza, carente de fuerza y sentido! Por varias razones:
✔ La primera es que no me parece que la medida –caso de que se hiciera realidad, que lo dudo– vaya a poner en riesgo el suministro eléctrico a los consumidores españoles, puesto que sobra mucha capacidad de generación. Y al gobierno debe importarle mucho más esa situación de exceso de oferta que el enfado de alguna empresa, por muy importantes que sea.
✔ En un sistema tan sobredimensionado como el nuestro y con la dependencia energética que tiene nuestro país (del orden del 90 %) la medida sería un alivio para muchas otras empresas y ciudadanos que están deseando aumentar la proporción de energías renovables que utilizan.
✔ Si fueran las centrales de ciclo combinado las que piensa cerrar, el poco o mucho gas natural que esas centrales dejaran de consumir, mejoraría la balanza de pagos española y reducirían los pagos por el exceso de gases de efecto invernadero que producimos En este caso, podría abaratarse el coste del kWh del régimen ordinario (grandes hidroeléctricas, nucleares, de carbón y ciclos combinados), porque el kWh producido con gas natural es el más caro del pool, y termina fijando el precio final.
✔ Por otra parte, como dicen que no han solicitado la continuidad de Garoña que el gobierno les había concedido graciosamente, pues “miel sobre hojuelas”; aunque sea poco a poco podemos ir avanzando en la consecución de un sistema eléctrico algo más razonable.
Es decir, todo es bueno, por lo cual a mi me parece estupendo que este señor cumpla su amenaza, y deberíamos animarle a que lo haga. Aunque si lo que parece que le preocupa es que el gobierno, en su tan anunciada reforma energética, vaya a hacer caso a “los renovables” no debe inquietarse.