El presidente de Portermosolar ha querido responder a las críticas de las eléctricas y a la petición de moratoria realizada por UNESA para el sector termoeléctrico. No es la primera vez que contesta y no será la última. Esta mañana, Valeriano Ruiz ha hecho un llamamiento a la unidad de todas las energías renovables frente a los “ataques furibundos de las grandes compañías eléctricas, no sólo infundados, sino también hipócritas e injustos. Lo peor de todo en el caso de España es que si consiguieran sus objetivos paralizarían un proceso que ha costado mucho tiempo y trabajo situar en la posición tan positiva en la que estamos”.
De la misma manera, ha repasado las decisiones tomadas por el gobierno saliente. En su opinión ha creado “grandes niveles de confusión e intranquilidad”, si bien es cierto que a finales de 2013 habrá 2.500 MW termosolares instalados. La gran incógnita, a su juicio, es qué pasará a partir de ese año. En este sentido ha afirmado que el Plan de Energías Renovables (PER) se ha aprobado “de prisa y corriendo” y que marca un escenario de 4.800 MW para 2020 “claramente esquelético y muy limitado, que no podemos comprender en el sector”.
Cerrar las nucleares y no construir más ciclo combinado
Al hablar del futuro inmediato, Valeriano Ruiz se ha dirigido directamente al nuevo gobierno. Entiende “que parte de unas condiciones muy difíciles para todas las tecnologías de generación de electricidad, tanto para las renovables como para las convencionales”, y le ha instado a valore las ventajas que para el conjunto del país aportan cada tipo de tecnología.
Para el presidente de Protermosolar “es evidente que las centrales nucleares deben clausurarse a medida que vayan cumpliendo el tiempo para el que fueron diseñadas” y que “no deben construirse más centrales de ciclo combinado”, así como que se debe caminar “hacia la generación distribuida y el vehículo eléctrico”. Ha añadido que, de las energías renovables, “la que más expectativas de futuro presenta es la solar termoeléctrica, por su capacidad de almacenamiento y de hibridación”, que la convierte en totalmente gestionable.
Sevilla, capital mundial termosolar
En Sevilla están durante hoy y mañana 700 congresistas en la cita más importante a nivel mundial sobre energía solar termoeléctrica. Y no es causal que se celebre en la ciudad hispalense. El presidente de Protermosolar ha iniciado su salutación del congreso recordado que la última central termosolar conectada a la red ha sido ‘Helionergy 1’, construida en Écija por Abengoa y E.ON, y hace tan sólo unos días OHL y Solar Millenium anunciaban el inicio de la central de Arenales, en Morón de la Frontera.
Son los dos últimos ejemplos de una tecnología en la que España es líder mundial, por delante de Estados Unidos. Vanguardia tecnológica como la que recibió el premio europeo de la innovación para la central de Gemasolar, desarrollada por la empresa española SENER y el consorcio Masdar, de Abu Dabi. Son hechos destacables, como también lo es que en la provincia de Sevilla se encuentre una de cada tres centrales termosolares operativas en nuestro país (8 de las 24 actualmente existentes), con 300 MW de los 1.002 instalados.
Fuente de riqueza y empleo
Valeriano Ruiz también se ha referido a un reciente estudio de la consultora Deloitte sobre la situación del sector termosolar en España. Este informe demuestra que la riqueza creada por las centrales termosolares, los ingresos generados a la Seguridad Social y a Hacienda y los ahorros económicos por CO2 dejado de emitir y en importaciones energéticas multiplican con creces las primas por producción recibidas.
Según dice textualmente la consultora Deloitte, “si se ponen en la balanza los impactos positivos que se derivan de las actividades del sector, llámese contribución al PIB de 1.650 millones de euros; generación de 23 844 empleos; aportaciones por concepto de cotización a la Seguridad Social, 270 millones de euros; impuestos sobre beneficios de sociedades, 66 millones de euros; IRPF, 71 millones de euros; ahorro en concepto de derechos de emisión, 5 millones de euros; sustitución de importaciones de combustibles fósiles, 24 millones de euros, y posicionamiento de las empresas españolas en el mercado internacional, puede constatarse que las políticas de apoyo a esta tecnología a través de las primas a la generación, que en 2010 supusieron 185 millones de euros, han sido una apuesta eficiente en términos económicos y tecnológicos para nuestro país”.
A estas cifras habría que añadir el coste de los subsidios de desempleo medios que el Estado se ha ahorrado de pagar a las 23.844 personas que habrían estado sin ocupación de no haberse construido las centrales termosolares y que habría ascendido a 176 millones de euros sólo el año 2010, una cantidad equivalente al total de primas recibidas. “Dicho de otro modo, por cada euro en primas a la termosolar, el Gobierno se ha ahorrado otro en subsidios de desempleo” concluye Protermosolar.
El número total de personas empleadas por el sector termosolar ascendió a 23.844 en el año 2010, ayudando así a la convergencia de Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha con el resto de España y con un beneficioso impacto en sectores muy afectados por la crisis, como la construcción, el metal y los montajes industriales. La conclusión de Deloitte es que, si se cumplen los objetivos establecidos en el Plan Nacional de Energías Renovables (PER), el sector termosolar mantendría este nivel de empleo durante todo el decenio y que sostendría unos 20.000 puestos de trabajo anuales en el año 2020. Asimismo, de mantenerse los apoyos necesarios para alcanzar los objetivos de penetración de la energía termosolar, la contribución al PIB nacional pasaría de los 1.650,4 millones de euros de 2010 a los 3.516,8 millones en 2020.