"Convocar subastas específicas por tecnología permite brindarle al sistema lo que necesite en cada momento". Lo dice el secretario general de la Asociación Española para la Promoción de la Industria Termosolar, Gonzalo Martín. Si se quiere un almacenamiento "de rápida respuesta y de corta duración" -apunta Martín- deberían convocarse "subastas de baterías, pero no de centrales fotovoltaicas que únicamente amplíen una o dos horas su operación". Lo que le propone Protermosolar al Gobierno es que convoque subastas de potencia renovable que genere "exclusivamente a partir de la puesta de sol y con almacenamientos de larga duración", o sea, subastas para centrales termosolares con almacenamiento térmico en sales fundidas, solución técnica ya viable y perfectamente demostrada en España, donde hay centrales termosolares que generan electricidad de noche gracias a sus tanques de sales térmicas, que funcionan como pilas que acumulan el calor del Sol durante el día para generar con él energía eléctrica por la noche.
La dicotomía potencia-energía
El secretario general de Protermosolar apuesta con claridad por otro lado por las subastas de potencia, no de energía. De esta forma -explica Martín- se puede reducir el precio de adjudicación, a diferencia de lo que sucede siempre previsiblemente en el caso de subastar energía producida. ¿Por qué? Pues porque hay diferencias significativas de recurso (horas de lluvia, horas de viento, horas de Sol) entre un año y otro, y ese factor incorpora necesariamente un elemento de riesgo que incrementa el precio de las ofertas. Suben pues las ofertas (sube el precio por ganar la subasta), lo cual perjudicaría al inversor e, indirectamente, al consumidor final, en el que acabaría repercutiéndose ese incremento (incremento que no habría lugar si lo subastado fuera la potencia de generación).
Por fin, el secretario general de la Asociación solicita "estabilidad retributiva y visibilidad sobre futuras subastas", factores ambos que considera "son clave para reducir el precio final de la energía, eliminando o mitigando la exposición a mercado y ofreciendo vidas regulatorias largas que permitan amortizar la inversión", lo cual -eliminar el precio final de la energía- beneficiaría al consumidor final.
Esto es lo que, en su editorial, apunta el secretario general de Protermosolar sobre la subasta portuguesa de Fotovoltaica con almacenamiento
«La reciente subasta solar en Portugal ha sido la primera que incluía una categoría específica para proyectos solares con almacenamiento. Aunque en principio era tecnológicamente neutra, los requisitos de almacenamiento, al menos un 20% de la capacidad total y duración de 1h a potencia nominal, estaban muy orientados al uso de baterías sobre otras opciones como almacenamiento térmico o hidrógeno. De los 700 MW disponibles, se han adjudicado 670 MW íntegramente en proyectos fotovoltaicos (con y sin almacenamiento) y se ha conseguido la adjudicación más barata a nivel mundial, 11,14 €/MWh. Proyectos bajo el régimen de almacenamiento no tienen directamente una tarifa regulada, sino que reciben una contribución anual por su potencia y los ingresos de la venta de mercado, pero se establece un límite del pool por encima del cual la instalación debe devolver al sistema un 90% de dicho exceso. Por tanto, no se puede comparar directamente con subastas pay-as-bid o con PPAs. El Gobierno portugués, para poder comparar las ofertas, ha diseñado un sistema que evaluaba las ofertas según el valor presente (NPV) de los 15 años de su vida regulatoria. No obstante, los promotores podrían estar pensando en un valor futuro del punto de acceso al que se conectaban que distorsionase su NPV ofertado»
Protermosolar, la Asociación Española para la Promoción de la Industria Termosolar, fue fundada en 2004 con el objetivo de promover el desarrollo de la industria termosolar española. En la actualidad, cuenta con 50 miembros que representan toda la cadena de valor del sector: promotores, constructores, fabricantes de componentes, ingenierías, consultoras, centros de Investigación, etc.
