La planta dispondrá de módulos para distintas tecnologías con diferentes rangos de temperatura y tiempo de almacenamiento: sales fundidas, PCM (Phase Change Materials, Materiales en cambio de fase), sorción (adsorción reversible de agua en sólidos para acumular altas densidades de energía de forma estable durante periodos prolongados de tiempo) o HTF (Heat Transfer Fluids, aceites térmicos). Con ello, la planta aspira a convertirse en un referente mundial como banco de pruebas, según indica la asociación Protermosolar.
Ubicado en Cáceres, el Centro Ibérico de Investigación en Almacenamiento Energético contará con la tecnología más avanzada del mundo y dará respuesta a los retos tecnológicos y científicos asociados a la gestión de las energías renovables. El centro estará dotado de laboratorios de última generación que permitirán desarrollar todo el ciclo del almacenamiento de la energía a distintas escalas.
El CIIAE busca dar respuesta a los retos tecnológicos y científicos en gestionabilidad de la energía verde con investigaciones en distintas áreas, como el almacenamiento de energía basado en diferentes tecnologías (Li, Na, baterías de flujo, supercondensadores, metal-aire, etc), la generación de hidrógeno, la catálisis para producción de combustibles sintéticos, la captura de CO2 y aplicaciones industriales del hidrógeno. En el centro también se estudia el almacenamiento térmico, la simulación atómica, el análisis de ciclo de vida y el análisis y regulación de sistemas energéticos.
Tras el desarrollo termosolar tan intenso de la pasadas dos décadas, España ha generado un vasto conocimiento en el área, dando lugar a empresas como RPow, formada por profesionales provenientes de los grandes EPCistas como Sener o Abengoa, que están a la vanguardia de estas tecnologías y procesos con proyectos por todo el mundo.