La Plataforma Solar Castilla-La Mancha está compuesta por dos plantas termosolares idénticas de 50 MW de potencia cada una y de tecnología cilindroparabólica. Esta tecnología consiste en un campo de colectores que siguen el movimiento del sol y cuyos espejos, con forma cilindroparabólica, concentran los rayos en los tubos receptores, localizados en la línea focal del cilindro. En estos tubos, el fluido caloportador alcanza aproximadamente los 400ºC. El fluido caliente circula por intercambiadores de calor para producir vapor en las condiciones adecuadas que, a su vez, se utiliza para generar electricidad en una turbina de vapor convencional. Según Abengoa, la central permitirá "un significativo ahorro energético y de combustible, y evitará la emisión de 63.000 toneladas de CO2 a la atmósfera anualmente". La construcción de las plantas –concluye la nota distribuida por la compañía– ha generado más de 1.650 puestos de trabajo durante su construcción y 90 puestos directos permanentes con la entrada en operación.