La industria solar térmica está sufriendo los efectos de la crisis sobre el sector de la construcción. Las expectativas no son buenas, según las consideraciones de la Asamblea General de ESTIF. La conclusión para 2010 es un mercado contraído por segundo año consecutivo. Para el ejercicio 2011 hay algunos indicios de recuperación, pero por el momento sólo son señales poco concretas.
La previsión es que el mercado solar térmico disminuya en España por tercer año, mientras que en países como Alemania, Francia, Austria, Grecia e Italia lo más probable es que las cosas se queden como están o, en el mejor de los casos, que experimenten un ligero crecimiento. A medio plazo se confía en los beneficios que aporte la puesta en marcha por parte de los estados miembros de los planes de acción en materia renovable y la transposición de las normas de eficiencia energética a los edificios.
El nuevo presidente de ESTIF, Robin Welling, ha afirmado que “en los próximos años ESTIF intensificará su actividad para que la energía solar térmica esté entre las prioridades de la agenda política energética”. En su opinión el sector que representa puede contribuir significativamente a los objetivos del 2020.
Entre las actuaciones prioritarias de la nueva Junta Directiva destaca presionar a favor de una legislación favorable sobre el etiquetado energético, promover normas europeas y eliminar obstáculos innecesarios.
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