Plataforma Solar de Almería, líder en la investigación de la energía solar térmica

La Plataforma Solar de Almería (PSA) inició su andadura a principios de los 80 con un objetivo claro: demostrar la viabilidad de la energía solar para su utilización en centrales térmicas. Hoy, comprobado que ese aprovechamiento es posible, investiga cómo abaratar los costes de la infraestructura necesaria para la obtención de la energía solar y cómo incrementar el rendimiento de las centrales solares térmicas. Para realizar estos estudios, la Plataforma, dependiente del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), cuenta con la planta CESA-1, una instalación formada por 300 heliostatos de 40 m2 (espejos que giran para captar los rayos del sol) y una torre central de 70 m de altura donde se concentra la energía captada por los espejos y en la que la radiación se transforma en energía térmica.
Entre los más llamativos figura el estudio del comportamiento de nuevos materiales para el Penetrador Marte de la Agencia Espacial Europea. Otros trabajos que han salido de sus laboratorios, quizá no tan curiosos pero no por ello menos importantes, son avanzados sistemas y componentes de aprovechamiento de la energía solar para la generación eléctrica y para le detoxificación de los residuos industriales y agrícolas, así como nuevos procesos para la desalinización del agua del mar, vitales para la obtención de agua potable en zonas desérticas de la costa. La PSA está considerada, además, como Gran Instalación Científica Europea, razón por la cual recibe subvenciones de la Comisión Europea y la visita constante de los científicos que trabajan en energía solar. Dentro de Europa no hay ninguna instalación similar -la francesa Themis, que hasta 1986 era su "competidora", sólo se utiliza ahora para la medición de rayos gamma-, y en el resto del mundo tan sólo hay dos plantas de sus mismas características, en Estados Unidos e Israel.

Origen del Universo
El pasado año, la PSA inició otro ambicioso proyecto: el estudio de la radiación gamma procedente de estrellas y nebulosas. La ubicación de la plataforma en pleno desierto de Almería, una zona de escasa pluviosidad y alejada de fuentes de contaminación lumínica, la convierten en el lugar perfecto para realizar estas investigaciones, que tienen por finalidad medir con mayor precisión la distancia que nos separa de las constelaciones más alejadas y, así, conocer mejor la antigüedad del Universo.

"Los rayos gamma son sumamente débiles, pero tienen la ventaja, frente a otras radiaciones estelares, que llegan hasta nosotros casi en línea recta, razón por la cual son tan útiles para medir con precisión distancias entre la Tierra y otros cuerpos celestes ", explica Manuel Romero, coordinador del proyecto desde el CIEMAT. Ahora bien, debido a su extrema debilidad se necesita una oscuridad prácticamente absoluta para hacer el seguimiento de esta radiación, así que los estudios sólo son posibles en noches despejadas y sin luna. Cuando se dan esas circunstancias, el ordenador central de la PSA orienta el campo de espejos hacia la nebulosa del Cangrejo, que es la que se está analizando en estos momentos, y la radiación captada se concentra en apenas unos centímetros. Es decir, que se "mete" en un pequeño punto los rayos gamma antes dispersos en los 2.000 m2 de espejos.

La PSA no ha tenido que hacer grandes modificaciones para adaptarse a este proyecto. "De hecho -señala Romero- nos hemos beneficiado de él ya que el ordenador central que hace el seguimiento de los heliostatos ha sido mejorado y se ha habilitado un sistema de control alternativo que ahora nos permite seleccionar en cualquier momento tanto el sol como otra estrella y hacer un seguimiento de mayor calidad y frecuencia". En el proyecto, bautizado con el nombre Graal, intervienen, junto al CIEMAT, universidades de Madrid, Sevilla y Almería y el Instituto alemán Max Planck, el más prestigioso del mundo en investigación básica. Desde este año cuenta con financiación por parte de la Comisión Europea.