La Asociación Chilena de Energías Renovables (Acera), entidad que agrupa a más de 100 empresas que desarrollan proyectos, prestan servicios y suministran equipamiento asociado a las Energías Renovables No Convencionales (ERNC), acaba de difundir un comunicado en el que señala que comparte lo expresado por Acesol, "por lo que quiere sumarse al llamado para que el presidente Sebastián Piñera patrocine la ley que ha generado importantes crecimientos en la industria de energía solar en el último tiempo" (la ley en cuestión es la número 20.365). Según Acesol, esta ley "ha marcado un antes y un después en el desarrollo solar térmico de nuestro país; antes de su entrada en vigencia, en agosto del año 2010, sólo se habían instalado en toda la historia de Chile unos 9.600 metros cuadrados de colectores solares térmicos, a pesar del indiscutido potencial solar que nos caracteriza; pues bien, en sólo dos años se han superado los 10.000". El subsidio proyectaba instalar 150 mil sistemas solares térmicos en cinco años -apunta Acesol-, pero "sólo ha funcionado en la práctica dos años y los últimos seis meses la incertidumbre de si será aplazado o no ha paralizado los proyectos".
Gran potencial de crecimiento
El problema -asegura Acesol- es que "hoy las empresas constructoras están dejando de incorporar sistemas solares térmicos en sus proyectos para sus nuevas viviendas por la demora en concretarse este proyecto" (la prórroga). La patronal solar térmica chilena señala que, "si el proyecto [de prórroga] no es enviado a la brevedad para su aprobación al Congreso, todo el desarrollo que ha alcanzado esta industria en los dos años de vigencia de esta ley se perderá". En sintonía con Acesol, el director ejecutivo de Acera, Carlos Finat, ha señalado que "la utilización de sistemas solares térmicos ofrece un gran potencial en nuestro país y la ley 20.365 ha sido fundamental para promover el uso de paneles en casas y empresas. Existe todavía un gran potencial de crecimiento para estas aplicaciones, y por ello es fundamental que los beneficios de esta ley se extiendan en el tiempo, ojalá como una normativa que permanezca varios años”.
Del dicho al hecho
En realidad -matizaba Acesol en un comunicado hace unos días- la prórroga había sido anunciada "públicamente, hace más de un año, el 23 de octubre de 2011, por el entonces ministro de Energía Rodrigo Álvarez, cuando inauguraba el primer edificio que recibiría la franquicia". Álvarez tenía claro -continúa Acesol- que "dos años para impulsar el mercado solar térmico eran insuficiente". Desde entonces, "cientos de empresas que han sido creadas al amparo de esta ley esperan un proyecto de ley que aún no se concreta, pero que hoy está a las puertas del horno; sólo le falta la firma del presidente Piñera". Según la patronal chilena de la solar térmica, "lo que más preocupa a los empresarios solares es que se está haciendo cada vez más difícil que constructoras e inmobiliarias incluyan colectores solares térmicos en sus casas y edificios, ante la poca claridad que existe de que la ley sea prorrogada y dado el timing que tienen los proyectos de construcción, de entre un año y diciocho meses". Según los datos de la Asociación Chilena de la Energía Solar, los sistemas solares térmicos permiten economías que van del 30 al 75%, según la zona, con respecto al costo de la energía tradicional.