¿Cuáles son, en estos momentos, los principales retos del sector de la energía eólica? El primero, reducir los costes de capital y el tiempo de comercialización. El 70% de LCOE (valor del coste total actual) del sector se relaciona, precisamente, con la instalación, de los cuales las turbinas eólicas son responsables de entre el 64% y el 84% de estos costes. El otro 30% está relacionado con los costes de operación y mantenimiento (O&M). Está comprobado que los costes de mantenimientos de las turbinas aumentan a medida que las plantas eólicas llegan al final de su ciclo de vida,
El segundo reto del sector es aumentar la eficiencia del O&M: estos representan el 60% de los costes OPEX, debido a tiempos de inactividad no planificado, mantenimiento correctivo, etc.
Y en tercer lugar, es necesario optimizar la producción de energía. En este sentido, la capacidad está determinada predominantemente por dos factores: la calidad de los recursos eólicos y la tecnología utilizada por las turbinas y la planta.
Más valor para las plantas eólicas
Para seguir impulsando la energía eólica, es necesario abordar estos retos, con soluciones integrales que ayuden a las plantas en todo su ciclo de vida. Por ejemplo, la arquitectura EcoStruxure Power for Wind es una solución de energía end-to-end.
Durante la fase de diseño y construcción de la planta, permite reducir el tiempo de comercialización y el coste del proyecto al optimizar la ingeniería y el diseño, simplificando la instalación y la puesta en marcha, al aprovechar la tecnología de gemelo digital, y de conformidad a los estándares del sector.
Durante la fase de operación y mantenimiento, maximiza los ingresos y optimiza el funcionamiento al enfocarse en la seguridad de las personas y de los activos, la fiabilidad del sistema, la eficiencia operativa y la ciberseguridad.
En última instancia, se dota la planta de una capa digital en el Edge, para controlar cómo está funcionando la turbina y cómo se está entregando la energía, y se añade más valor con analíticas, aplicaciones y servicios.
Otra solución, enfocada especialmente en las turbinas, proporciona analíticas predictivas para optimizar el mantenimiento, mejorando así la eficiencia y la rentabilidad durante las operaciones. ¿Cómo? Con Inteligencia Artificial.
Como decíamos al principio del artículo, los costes de operación y mantenimiento aumentan, principalmente, como consecuencia del envejecimiento de las turbinas. Por eso es importante intentar anticipar un fallo potencial de cualquier componente crítico de la turbina, que son no solo los eléctricos sino también los mecánicos.
Es aquí donde esta herramienta aporta un valor añadido, con algoritmos que permiten a los usuarios finales –operadores de parques eólicos– supervisar y realizar diagnósticos tempranos de fallos potenciales. Esta tecnología puede aportar una reducción de costes O&M de hasta el 8%, ahorrando cientos de miles de euros y aumentando el rendimiento y la vida de los activos un 10%.
El futuro del sector de las renovables está marcado por los objetivos europeos y el PNIEC. España se encuentra en una buena posición y su tecnología es cada vez es más competitiva. Sin embargo es necesario seguir impulsándola para llegar al objetivo: contar con 50.333 megavatios de energía eólica en el año 2030.