Un auditoría energética, "para analizar los diferentes consumos, con el objetivo de maximizar la eficiencia energética de las instalaciones del Congreso", y un estudio de viabilidad para averiguar si es posible y cómo sustituir "las actuales fuentes energéticas por energías renovables, al objeto de maximizar la producción renovable". Los diputados Juantxo López de Uralde y Txema Guijarro, del Grupo Parlamentario Confederal Unidas Podemos - En Comú Podem - Galicia en Común, han remitido hoy un escrito a la Mesa del Congreso en el que plantean esas demandas (una auditoría y un estudio de viabilidad, que valoraría tambien la posibilidad de poner en marcha instalaciones de autoconsumo en el Congreso) y en el que señalan como objetivo último la rebaja de la factura energética del Congreso. Unidas Podemos también destaca el potencial "efecto ejemplarizante para otras entidades" que podrían tener estas iniciativas.
Esta misma semana la agencia Europa Press (EP) publicó una información según la cual la Cámara Baja española reservó en su Presupuesto para el presente ejercicio 1,75 millones para la factura de la luz, pero el pasado mes de junio, al comprobar cómo se había disparado el precio, decidió autorizar un aumento del gasto por importe de 3,72 millones. Ese dinero salió de la cuenta de remanentes de la Cámara, que, a 31 de marzo de 2021, fecha de cierre del ejercicio 2020, tenía 104,98 millones.
Según EP, en las cuentas de la Cámara para el año que viene (dentro de los Presupuestos Generales del Estado), el capítulo para gastos corrientes en bienes y servicios asciende a 45,41 millones de euros, un 20,63% más que el año anterior, cuando se presupuestaron 37,64 millones. El incremento se explica por esa subida de precio de la luz y también del gas, ya que el consumo se ha mantenido en términos similares. En concreto -apunta la Agencia-, la previsión es que la factura eléctrica aumente un 294,26% y que lo se paga por el consumo de más suba un 77,78%.
En su petición a la Mesa del Congreso, Unidas Podemos considera que, "si bien esta subida está directamente vinculada a el incremento del precio de los combustibles fósiles en el mercado energético, lo cierto es que pone de manifiesto una realidad que es necesario abordar: el Congreso de los Diputados no puede ser ajeno a la transición energética que está acometiendo todo el país, y en su conjunto la Unión Europea", motivo por el cual solicitan "estudiar el potencial de una profunda reforma de las instalaciones energéticas del Congreso".