ARIAE convocó un concurso internacional que se ha adjudicado a la propuesta conjunta de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) y de la Universidad ESAN de Perú, por lo que la escuela tendrá una doble sede. La sede para la Regulación Eléctrica (EIR-E) estará ubicada en la capital chilena, Santiago, mientras que la de Regulación de Hidrocarburos (EIR-H), lo hará en peruana, Lima.
“A su vez –se informa en un comunicado-, cada una de estas universidades tiene acuerdos bilaterales con al menos otras seis universidades iberoamericanas, y se espera que a indicación de ARIAE, este elenco se amplíe a la Universidad de Externado de Colombia”.
Con este bagaje internacional, las actividades de la Escuela Iberoamericana de Regulación (EIR) se podrán desarrollar tanto de forma presencial en cualquiera los países Iberoamericanos, como de forma on line o remota, y estarán dirigidas, tanto a los técnicos de los reguladores y administraciones energéticas como a terceros en general.
Se espera que las actividades de la EIR comiencen a desarrollarse en el segundo semestre de este año, una vez se concreten a fines de marzo los contenidos curriculares, los programas de formación, gobernanza, así como el seguimiento de las actividades y los mecanismos de financiación.
El proyecto educativo busca contribuir a la formación de profesionales expertos en regulación energética en Iberoamérica, al tomar como el modelo el implementado en la Unión Europea.
“El objetivo –se asegura- es contribuir a formar una red de expertos capaces de atender los cambios en las políticas energéticas de los países dirigidos a lograr su adaptación al triple objetivo de competitividad, seguridad del suministro y sostenibilidad ambiental, sin olvidar también el objetivo del acceso universal a la energía como medio relevante para paliar la pobreza”.
La ARIAE fue creada en el año 2000, a iniciativa del regulador español de energía, con el fin de armonizar criterios en materia de regulación energética, facilitar la adaptación a las nuevas políticas energéticas y desarrollos tecnológicos, así como intercambiar experiencias regulatorias en los distintos ámbitos geográficos. La Asociación reúne a 23 Instituciones reguladoras energéticas (electricidad, gas e hidrocarburos) de 16 países de Iberoamérica.