El discurso que ha usado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para presentar el Proyecto Estratégico de Energías Renovables, Hidrógeno Renovable y Almacenamiento (proyecto estratégico ERHA) ha girado en torno a dos ideas fuerza: (1) la transición energética que está abordando nuestro país tiene que ser "diseñada y fabricada en España"; y (2) la colaboración público-privada es clave para materializar esa transición energética. "Juntos somos más fuertes: esta es una convicción por parte del Gobierno de España, la convicción de que juntos somos más fuertes, de que la colaboración y la cooperación entre las empresas y la administración general del Estado es lo que nos va a dar la respuesta al desafío de la emergencia climática y la transición ecológica" (el apunte lo ha hecho, en el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ante un auditorio en el que la presencia de altos ejecutivos de grandes empresas energéticas y siderúrgicas españolas era considerable).
El Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (perte) de Energías Renovables, Hidrógeno Renovable y Almacenamiento (EHRA) es el tercer perte que presenta el Gobierno (el primero fue sobre salud y vanguardia; y el segundo, sobre vehículo eléctrico y conectado). Según Sánchez, el Ejecutivo ha apostado por elaborar un "proyecto estratégico" para las renovables, el hidrógeno y el almacenamiento porque identifica esta como "un área clave para el presente y el futuro de nuestra economía (...). El principal mensaje que me gustaría trasladar al sector es que vamos en serio, que vamos a apostar por este sector, porque tiene una alta potencialidad en múltiples parámetros que tienen que ver con un objetivo fundamental para el Gobierno: el progreso, el desarrollo y la cohesión territorial y social de España". El presidente ha insistido en todo momento en la trascendencia de este sector, al que ha definido como "palanca" para otros sectores: "palanca de desarrollo tecnológico, de digitalización, de reindustralización en verde de nuestro país".
Sánchez ha dirigido buena parte de su alocución a los inversores
«La nuestra es una apuesta decidida por las energías renovables. Incluso en este momento, de tanta turbulencia, vamos a redoblar nuestra apuesta por las energías renovables, que quede claro, a los inversores y a las empresas. Vamos a apostar por las energías renovables. Porque España cuenta con el mayor recurso solar de toda Europa. Porque también destacamos por nuestro recurso eólico. Tenemos más de 8.000 kilómetros de costa. Tenemos una posición geográfica envidiable, y tenemos un sector naval y marítimo pionero. Estamos idealmente posicionados para liderar el desarrollo de la energía eólica marina flotante. La apuesta es clara. Y por eso impulsar las energías renovables es una prioridad nacional para el Gobierno de España. En todos los órdenes: para reducir emisiones, para mejorar la competitividad de las empresas, para disminuir las importaciones, para generar actividad duradera, empleo de calidad, y también para luchar contra la volatilidad de los precios en los mercados internacionales de la energía»
«Desde el Gobierno de España hemos desarrollado durante estos últimos tres años un marco estratégico que creo que ofrece predictibilidad a los inversores, a los empresarios, un marco que nos permite también superar etapas oscuras, o al menos de mucha incertidumbre por los efectos retroactivos que se planteaban en ellas, y volver a convertir a nuestro país en un lugar atractivo para la inversión en transición energética. Tenemos todas las condiciones para poder lograrlo»
El presidente Sánchez ha identificado los que considera los tres pilares de ese marco estratégico que ha desarrollado su Gobierno durante estos tres últimos años. El primer pilar sería el de las energías renovables, por las que -ha insistido- el Ejecutivo va a seguir apostando sin fisuras; el segundo pilar sería el almacenamiento, imprescindible para abordar la plena integración de las energías renovables; y el tercero, el hidrógeno, que va a permitir la descarbonización de sectores en los que es difícil encontrar otras soluciones de descarbonización, "sectores muy importantes para nuestro país, como el del transporte pesado, el de la siderurgia (aquí hay algunos representantes de compañías siderúrgicas muy importantes para el territorio), la industria química". Llegado aquí ha vuelto a insistir en la necesidad de la colaboración público-privada.
Pedro Sánchez: «creo que el hidrógeno verde, el desarrollo del almacenamiento de energía mediante las actuaciones de colaboración público privada nos van a permitir acelerar la transformación de nuestro sistema energético (...). Y en este proceso lo que pretendemos es generar nuevos modelos de negocio; lo que pretendemos es, también, trascender a la gran empresa, y llegar a las medianas empresas, a las pequeñas, a los colectivos de autónomos, creando nuevos empleos, para posicionar a nuestro país a la vanguardia tecnológica industrial del sector tanto a nivel europeo como a nivel mundial»
¿Qué queremos conseguir con este Proyecto Estratégico?, se ha preguntado Sánchez en un momento dado. "Me gustaría resumirlo en tres objetivos", ha dicho. El primero que ha señalado es el que titula esta información: "con este nuevo Perte, el Perte EHRA -ha apuntado-, vamos a llevar a cabo una transición energética diseñada y fabricada en España. Vamos a apostar por la industria española, por las empresas, por las pymes españolas, por nuestros trabajadores y nuestras empresas (...). Es fundamental, es decisivo -ha dicho-, que consolidemos la cadena de valor de la energía para dotar a España de la autonomía energética que deseamos. No con soluciones importadas, sino con capacidades tecnológicas, con capacidades industriales, con el conocimiento y el modelo de negocio propio, español".
El segundo de los objetivos a los que ha aludido es "maximizar la creación de empleo sostenible, aprovechando todo el potencial, todo el talento, y dotándolo de las herramientas necesarias. Ahí estamos haciendo muchas cosas -ha concretado-; esta semana precisamente las Cortes Generales van a aprobar ese nuevo marco de la Ley de Formación Profesional que sin duda alguna va a mejorar las capacidades de empleabilidad de nuestros jóvenes". Y en tercer lugar -ha concluido-, el tercer gran objetivo del perte que ha presentado hoy es "que las empresas españolas se puedan anticipar a esos retos de futuro, aprovechando los nichos, las áreas de competencia, que les permitan mantener en el tiempo el liderazgo tanto a nivel europeo como global".