La semana pasada la vicepresidenta tercera recibió a las patronales eléctrica (Aelec) y gasista (Sedigás), a representantes del sector petrolero, agentes sociales y a las organizaciones de consumidores y usuarios. Todo ello, tras anunciar que el Gobierno abriría una ronda de contactos antes de elevar al Consejo de Ministros el citado plan de contingencia, dirigido a reforzar el nivel de almacenamiento, un uso más eficiente de la energía y la sustitución del gas por otros combustibles allá donde sea posible, unida a una electrificación de la demanda y mayor capacidad de generación renovable.
Según indicaron a Europa Press fuentes del sector, Ribera invitó el pasado jueves a los representantes del sector energético a trasladar sus propuestas en tres áreas concretas para trazar ese plan: ahorro y eficiencia energética, aceleración al máximo de sustitución del gas a través de la electrificación y solidaridad con otros países europeos.
También se pidió la opinión de los diferentes sectores respecto a un orden para considerar a aquellos consumidores que podrían ser llamados prioritarios en el caso necesario de mantenimiento del suministro, como podrían ser hospitales, servicios de asistencia, industrias esenciales, etc.
En el caso del sector eléctrico, recordaron que han aportado y seguirán haciéndolo iniciativas de ahorro y eficiencia energética y destacaron su contribución a la descarbonización de la economía con importantes inversiones que permitan al país avanzar en la independencia energética.
Estrategia común europea
Las medidas de este plan se enmarcan dentro de la estrategia de la Unión Europea para enfrentarse a ese posible corte del suministro de gas por parte de Rusia. El próximo 21 de julio se sabrá si el Gobierno de Vladimir Putin decide restablecer el paso de gas a Alemania por el gasoducto Nord Stream 1, cerrado para abordar unas tareas rutinarias de mantenimiento.
El 26 de julio está prevista una reunión de los mandatarios de la Unión Europea con el fin de consensuar una estrategia común ante este posible corte en el suministro, basándose en los planes de contingencia que cada país miembro debe entregar la próxima semana.