La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha adelantado esta mañana además que el Gobierno español respalda la propuesta europea de que la reducción del consumo energético sea "obligatoria", si bien ha matizado que ese respaldo español está condicionado al margen de ajuste reservado a los Estados miembros (Ribera ya consiguió que el ahorro voluntario del 15% para la UE se quedara en un 7% para el caso español). "Sí, somos partidarios, depende de cómo se proponga en términos precisos esta obligación y de qué margen nos den a los Estados para ajustarlo a la manera más justa y razonable de cumplir esta obligación", ha dicho la ministra en una entrevista en TV3 este martes recogida por Europa Press, en la que ha puesto el énfasis en -textualmente- el quién, el cómo y el cuándo se aplica.
Además, la ministra ha establecido que, aparte del ahorro, son precisas otras medidas. Y, entre ellas, ha hablado del precio. En concreto, Ribera ha instado a establecer un precio máximo a la compra del gas que llegue a Europa procedente de terceros países y por distintas vías, y no únicamente de Rusia a través de tuberías, y ha alertado que un tope no adecuado e insoportable para intermediarios podría provocar efectos indeseados.
La ministra de Transición Ecológica ve "muy probable" que las medidas incluidas en el llamado 'escudo social' se prorroguen, al prever una situación difícil e inestable para los próximos meses, si bien ha alertado que habrá que estudiar cómo ajustarlas.
Ribera se ha comprometido por otro lado a que la reforma de la tarifa regulada entre en vigor antes del próximo año y ha abogado por que se apruebe en el Congreso a través de tramitación ordinaria para facilitar "la máxima participación".