La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, que ha participado hoy en la Reunión Global Anual de Energía organizada por la escuela de negocios Esade, considera que es "importante" contar con el compromiso de todas las partes, desde los expertos y académicos a la comunidad empresarial, para no poner en riesgo la capacidad económica de la Unión Europea de invertir en innovación y en medidas sociales para que la transición energética sea justa. Ribera ha reiterado la necesidad de contar con "el apoyo de los ciudadanos" en esta transición, y ha destacado en ese sentido que es necesario asegurarse de que la ciudadanía pueda "experimentar los beneficios de esta transformación. La respuesta correcta -ha dicho- es acelerar la transformación".
La solución para el complejo escenario geopolítico que enfrentamos -ha afirmado la vicepresidenta del Gobierno- es precisamente, “la apuesta por las energías renovables, la electrificación y la eficiencia energética”. Por ello, “no debemos dar señales equivocadas ni a inversores, ni a consumidores, sosteniendo más tiempo tecnologías caras y contaminantes. La transición ecológica constituye un aliciente para la recuperación económica. Y, por esta razón, necesitamos el compromiso de las partes interesadas, de expertos, académicos y de la comunidad empresarial: es importante para no poner en peligro la capacidad económica de la Unión Europea a fin de invertir en innovación, en medidas sociales para que la transición sea justa e inclusiva”, ha concluido Ribera.
En la misma línea, el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea para el Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans, ha asegurado que la transición energética "será justa o no habrá transición". Timmermans ha puesto en valor la "ambición" del paquete europeo Fit for 55 (que plantea reducir en un 55% las emisiones de CO2 en la UE de aquí a 2030) y ha afirmado que "será difícil" de implementar si la transición no es justa. El vicepresidente de la Comisión Europea también ha querido destacar el papel "clave" de la industria en esta transición, para lo que será necesario -ha indicado- protegerla de la fuga de carbono, evitando así el traslado de la producción de las empresas a países con reglas de emisión menos estrictas que las del Viejo Continente.
Para Frans Timmermans, el paquete de medidas de la Unión Europea denominado Fit for 55 “se basa en fundamentos sólidos”. En ese sentido, el vicepresidente de la Comisión ha añadido que “muchos de los cambios que proponemos se inspiran en políticas de eficacia probada”, afirmación que ha apoyado con un dato: “desde 1990 -ha destacado-, las emisiones europeas han disminuido en más de un 20%, mientras que nuestra economía ha crecido más del 60%”. Timmermans considera así que nos hemos planteado un objetivo viable: “lo que necesitamos ahora es acelerar el ritmo”, ha dicho, para asegurar a continuación que “podremos hacerlo, siempre que no dejemos a nadie atrás; esta es la razón por la que nuestras propuestas políticas van acompañadas de un compromiso por realizar una transición socialmente justa”, ha añadido.
El consejero delegado de Repsol
Por otra parte, el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha defendido la necesidad de que la transición energética se haga aprovechando "cualquier alternativa" que reduzca emisiones. A este respecto, ha manifestado que "no hay ninguna razón" para prohibir los motores de combustión, ya que junto con los ecocombustibles -ha asegurado- pueden ser neutros en emisiones. Imaz ha abogado por otro lado por asegurarse de que la transición sea "real y no una revolución disruptiva", evitando además confundir "descarbonización con electrificación", ya que de lo contrario la industria y la sociedad "pagarán" la pérdida de competitividad.
El consejero delegado de otra petrolera, la portuguesa Galp, Andy Brown, ha advertido que es necesario "acelerar" la transición energética y el camino hacia la descarbonización, siendo conscientes de que el mundo demanda "cada vez más energía".
Además, ha coincidido con su homólogo Imaz en que la descarbonización debe representar "mucho más" que electrificación, y ha pedido (1) la colaboración de todos los jugadores en el proceso -gobiernos y empresas- y no "demonizar" las tecnologías existentes.
Por su parte, el consejero delegado del fabricante de aerogeneradores Siemens Gamesa, Andreas Nauen, ha destacado que con el paquete europeo Fit for 55 "no hay vuelta atrás" en la transición energética. Nauen ha abogado por un marco estable que vehicule una mayor ambición de objetivos a 2030.
Finalmente, la presidenta de Air Liquide España, Teresa Rasero, ha señalado que el liderazgo de Europa en hidrógeno será "primordial", especialmente en el actual contexto de precios alcistas de la energía.