Dos participantes de la acción han pegado sus manos con cola al stand mientras reclamaban que "Iberdrola y las instituciones tienen que decir la verdad sobre sus actividades ecocidas y actuar de inmediato conforme a lo establecido por el IPCC". Las activistas han querido denunciar así "la incapacidad del Gobierno para abordar la necesaria protección del medio ambiente y la vida en la tierra". La portavoz del colectivo ha destacado que “la crisis climática es consecuencia directa de un sistema económico y político que permite la impunidad de las grandes corporaciones. Es una cuestión de supervivencia acabar con ellas”.
El colectivo señala que Iberdrola está aprovechando la crisis climática para venderse como empresa verde, "maquillando sus políticas que nos llevan a los peores escenarios contemplados por el IPCC". Iberdrola -explican desde Rebelión Científica- es la octava empresa con más emisiones de CO2 en España, según el informe que publicó en 2020 sobre descarbonización del Observatorio de la Sostenibilidad. El colectivo de defensa del clima señala en su comunicado que la compañía ha provocado "el desplazamiento forzoso de 40.000 indígenas en Brasil con proyectos de hidroeléctricas: muchas de las comunidades que tradicionalmente vivían en los bosques y los ríos han sido forzadas a desplazarse a guetos en las ciudades como consecuencia de su actividad ecocida".
La Rebelión Científica da comienzo así a la campaña de acciones de desobediencia civil que culminará la semana del 4 de abril. “El 1.5º ha fracasado, necesitamos una revolución climática”, señala el colectivo al tiempo que invita a la movilización masiva a través de su página web. La campaña -informa Rebelión- tendrá alcance global, "con una movilización de más de 1.000 personas de la comunidad científica y académica en más e 20 países en todos los continentes".
Credenciales
Extinction Rebellion se define como "un movimiento contra la emergencia climática apartidista y descentralizado, con presencia en 72 países diferentes y formado por un total de 1.140 grupos locales". Nace con tres demandas y un método. Las demandas son (1) que se diga la verdad sobre lo urgente de la crisis climática; (2) reducir las emisiones drásticamente; y (3) que se pongan en marcha asambleas aiudadanas para desbloquear la toma de decisiones. El método es la desobediencia civil. El grupo estatal de XR Spain ha incorporado una demanda cero (0) que debe inspirar a las otras tres: la justicia climática, entendiendo que los gobiernos deben priorizar las necesidades de los colectivos en situación de vulnerabilidad y opresión.