"Buenos días en un momento en el que las energías renovables pintan mejor que nunca". Así ha comenzado su alocución la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en el Congreso Nacional de las Energías Renovables, que es la gran cita anual del sector nacional de las energías limpias. Organizada por la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA), esta quinta edición del congreso puso el cartel de completo (el aforo presencial) hace ya unos días y contaba hoy a primera hora de la mañana con más de 400 profesionales atentos (200 en la sala) a los mensajes de apertura: el de la ministra Ribera, y el de Santiago Gómez, presidente de APPA Renovables.
Gómez, que ha sido el primero en intervenir y que ha defendido las virtudes de "todas" las energías limpias, ha destacado en su discurso tres ideas. En primer lugar, ha recordado que, "en los casi 35 años de trayectoria de APPA, siempre hemos advertido de los altísimos riesgos de nuestra dependencia energética, con tasas cercanas al 75%" (España importó en 2019 productos energéticos -sobre todo petróleo y gas- por valor de 44.000 millones de euros). En segundo lugar, el presidente de la patronal de las renovables ha alertado sobre los "cantos de sirena que nos quieren hacer ver que el gas natural y las centrales nucleares se corresponden con inversiones sostenibles" (algunos países europeos quieren incluir esas tecnologías entre las subvencionables con fondos europeos).
En tercer lugar, Gómez ha criticado el diseño de las subastas renovables, donde "hemos visto algunos errores, como, especialmente, hacer competir a las renovables entre sí simplemente por precio, lo cual nos parece un error y de los gordos. La fortaleza de las renovables -ha dicho el presidente de la patronal- está en su valor, no en el precio". El apunte vendría a hacer alusión al hecho de que no todas las renovables ofrecen el mismo tipo de electricidad. Las hay "con" sistemas de almacenamiento (como la termosolar o la biomasa), que pueden producir a demanda, pues pueden almacenar la energía y suministrarla cuando es precisa; y las hay "sin" sistemas de almacenamiento (como serían los casos de la eólica y la fotovoltaica).
Termosolar y biomasa son más caras (instalar un megavatio de termosolar o uno de biomasa cuesta más que instalar uno de fotovoltaica, por ejemplo), pero la electricidad que suministran tiene más valor, pues supera la barrera de la disponibilidad (no siempre disponemos del viento, como no siempre brilla el Sol, mientras que, por el contrario, sí que podemos gestionar un depósito de biomasa o los tanques de sales térmicas en los que las centrales termosolares acumulan el calor del día para producir electricidad de noche en función de las necesidades, en función de la demanda). De ahí que Gómez haya criticado las subastas que solo tienen en cuenta el precio, y no el valor de la electriciad.
Una vez ha concluido su discurso el presidente de la APPA, ha llegado el turno de la ministra, que ha destacado el trabajo y la "gran profesionalidad" del sector a lo largo de los últimos años, que ha calificado de complicados: "no ha sido un recorrido fácil -ha dicho Ribera-, pero sí es un recorrido ganador; pensemos en lo que representaban las energías renovables en nuestro mix eléctrico hace apenas diez años y en lo que representan hoy: han crecido casi un 30%".
La ministra ha hecho balance también de sus tres años al frente de Transición Ecológica: "en los últimos tres años hemos trabajado intensamente por orientar un marco regulatorio que permita que este sector crezca de una manera ordenada y responsable, con el apoyo social que merece".
Teresa Ribera
«Estamos asistiendo a los coletazos de un modelo energético antiguo donde probablemente todavía convivamos con el gas natural durante mucho tiempo, pero donde también sabemos que debemos acompasar (1) la salida de esos combustibles fósiles que generan volatilidad, alteraciones, dependencia del exterior, y (2) la penetración de esas nuevas alternativas de forma ordenada»
«Con algunos desafíos pendientes, como puede ser la integración en nuestros pueblos, en nuestras pequeñas comunidades, en nuestro paisaje; la coexistencia con otras actividades económicas; la participación; el sentimiento de orgullo que debemos ganarnos por parte de los ciudadanos que hoy por hoy a veces ven con preocupación el despliegue de numerosos proyectos todavía en papel en su término municipal
«Sabemos que la confianza social, el progreso económico y el respeto ambiental están íntiamente unidos y por todo ello la agenda de estos dos días [en referencia al programa del Congreso] nos permite observar cómo seguís trabajando, profundizando, entendiendo el modo en el que seguir mejorando (...). Enhorabuena por todo lo hecho hasta ahora y por todo lo que queda por venir»