Hasta ahora, varios estudios habían alertado sobre el declive mundial de las praderas de fanerógamas marinas, principales responsables del almacenamiento de carbono. Pero muy pocas habían cuantificado y evaluado espacialmente los servicios ecosistémicos marinos.
“La actual pérdida de biodiversidad marina está menoscabando cada vez más la capacidad del océano para proporcionar servicios ecosistémicos fundamentales para el bienestar humano”, afirman los autores de la investigación, publicada en la revista Ecosystem Services. “La pérdida de ecosistemas costeros y marinos —agregan— aumentará aún más por el cambio climático e, irónicamente, los ecosistemas marinos desempeñan un papel fundamental en el secuestro y almacenamiento de carbono que contribuyen a la mitigación del cambio climático”.
Con el objetivo de proporcionar información útil para llevar a cabo una mejora en la gestión y conservación de los ecosistemas marinos, el trabajo presenta un mapeo de las fanerógamas marinas (Posidonia oceanica, Cymodocea nodosa, Zostera noltii, Zostera marina y Halophila decipiens) para almacenar y secuestrar carbono "azul" en España.
El trabajo evalúa la capacidad futura de estas especies ara almacenar y secuestrar el carbono bajo tres escenarios de futuro plausibles (actuar como hasta ahora, empeorar o mejorar). También valora las implicaciones económicas de estos escenarios en los espacios protegidos por la Red Natura 2000 en España, repartidas entre las demarcaciones marinas de la costa del Atlántico Sur, Islas Canarias, Mar de Alborán y Mar Mediterráneo Occidental . “No consideramos la demarcación marina de la costa española del Atlántico Norte porque la mayoría de las fanerógamas marinas se encuentran en las desembocaduras de los ríos, y no en las zonas marinas o costeras”, aclaran lo investigadores.
Su conclusión es que el 82% del almacenamiento y el secuestro de carbono por las fanerógamas marinas se realiza actualmente dentro de estas áreas y que, el carbono "azul" costero representa, aproximadamente, el 0,7% del PIB nacional. Sin embargo, los resultados de los tres escenarios futuros modelados indican una disminución constante en la cantidad de carbono almacenado en estos ecosistemas para 2050, que llegan a ser de un 24% perdido en el escenario actual.
“El impacto económico de estas pérdidas equivale a 17.974 millones de euros, alrededor del 1,6% del PIB español”, detallan los autores. “Consideramos que es necesario un cambio transformador para la conservación y gestión de los ecosistemas marinos con fanerógamas en España y sus servicios de la Red Natura 2000 en un futuro próximo”, concluyen.