El galardón premia las contribuciones realizadas en favor de la energía sostenible en la UE, a nivel local y regional. Que es precisamente uno de los objetivos con los que trabaja la Asociación Europea de Agencias y Regiones para la Energía y el Medio Ambiente (Fedarene): poner en práctica y coordinar políticas energéticas y ambientales en 70 regiones de 20 países europeos y Noruega. El Premio, creado en 2014, lleva el nombre de Roger Léron, pionero del desarrollo energético regional en Europa y uno de los fundadores de la asociación. Fedarene cree que los niveles de gobernanza regionales y locales desempeñan un papel central en cuestiones de energía y clima, a través de su competencia en muchas áreas de política, su proximidad a los ciudadanos, y su conocimiento del territorio.
El Premio Roger Léron se estableció para reconocer los logros de muchas personas que trabajan sobre el terreno para avanzar en la transición energética, ya sea desde una agencia de energía local o regional, una autoridad pública, una organización sin fines de lucro o una empresa privada. “Todos muestran la misma creatividad, motivación, liderazgo y visión estratégica para ampliar la eficiencia energética y aumentar el uso de fuentes de energía renovables”, explican desde Fedarene.
Søren Hermansen, ganador en esta quinta edición, convirtió la isla de Samsoe (Dinamarca) en la primera isla renovable del mundo, libre de combustibles fósiles. Bajo su coordinación como líder de la Samsoe Enegy Academy y las inversiones del gobierno danés, en 2006 los habitantes de la isla consiguieron una huella de carbono negativa, de -3,7 toneladas/habitante.
Pep Puig es presidente de Eurosolar España. Y Rosario Heras presidió la Real Sociedad Española de Física. Los dos llevan muchos años trabajando en favor de las renovables y la eficiencia energética. Desde su puesto en el Ciemat, Heras ha tenido una larguísima trayectoria en el campo de la edificación sostenible. Pep Puig, un activista impenitente que ha puesto en marcha infinidad de iniciativas, es diputado en el Parlament de Catalunya por la lista de JxCat, y colaborador de la revista Energías Renovables desde sus inicios.
En su intervención durante la ceremonia de entrega de los premios, Pep Puig agradeció “a todas las personas con las que he trabajado a lo largo de 40 años para hacer posible que las renovables, y especialmente la eólica, estén hoy donde están, dominando el mercado mundial de generación. Si han llegado a este nivel es gracias a muchas personas anónimas que después de la primera crisis del petróleo (1973) empezaron a buscar, aprendiendo del pasado, nuevas formas de disponer de energía sin necesidad de quemar nada”.
“Hoy, ante el gran reto de la emergencia climática, va siendo hora de decir adiós a la economía adicta a la combustión de materiales fósiles, la fisión de materiales nucleares y al derroche de energía. Podemos alcanzar el 100% renovable en muy poco tiempo”. Pep Puig cree que para hacer realidad esta revolución energética, se necesitan dos cosas: “en primer lugar, es necesario que las personas, la ciudadanía, ejerzan su derecho inalienable a disponer de energía que necesitan en su vida cotidiana, mediante la captación, transformación y uso de la energía contenida en los flujos biosféricos y litosférica. Y en segundo lugar, es necesario cambiar nuestro lenguaje fósil, porque sin una revolución en el lenguaje de la energía, nunca seremos capaces de hacer la necesaria revolución energética”.