Un nuevo informe del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) muestra que ningún Estado miembro mediterráneo está en vías de alcanzar el objetivo del Pacto Verde Europeo de aumentar la cuota total de energía renovable hasta el 40% para 2030. Esto requerirá más trabajo para planificar emplazamientos para el desarrollo de energía renovable en alta mar en consonancia con la legislación y las normas medioambientales de la UE, y en equilibrio con el despliegue de energía en tierra.
Además, ningún plan nacional ha abordado con éxito las incertidumbres del cambio climático, a pesar de la vulnerabilidad de la región a la subida del nivel del mar y a los aumentos de temperatura, según la nota de prensa. "La ausencia continuada de un enfoque ecosistémico en la planificación marina hará cada vez más difícil que la UE y sus vecinos elaboren estrategias eficaces para anticiparse a los efectos adversos del cambio climático, que no solo están disminuyendo la productividad de la pesca en la región, sino que también están alterando permanentemente las costas debido a la erosión y a la subida del nivel del mar", anuncian.
Óscar Esparza, especialista en áreas marinas protegidas de WWF España: “los Estados miembros mediterráneos tienen el poder de acelerar la transición hacia una economía marina realmente sostenible en este mar, en la que actividades perjudiciales como, por ejemplo, la extracción de combustibles fósiles u otros recursos mineros no sean una opción. Esto solo será posible cuando la protección de los activos naturales está en el centro de los procesos de planificación marina y todas las partes interesadas tengan su voz en el desarrollo de estrategias sólidas a escala nacional, transfronteriza y regional para fortalecer la resiliencia ambiental, social y económica del Mediterráneo’’
Eslovenia a la cabeza
Por otra parte, el texto evalúa la planificación marina en el Mediterráneo y concluye que la región está muy atrasada en la aplicación de un enfoque ecosistémico a la gestión a largo plazo de la cuenca. Según la nota de prensa, los mares europeos son unas de las aguas más explotadas del planeta. Por eso, "avanzar hacia un equilibrio sostenible que ordene el espacio marino entre los diferentes sectores, como la pesca, navieras, el turismo, el petróleo y gas o las eólicas marinas, y que a su vez, garantice la conservación de los mares es vital", describen.
La Directiva sobre Planificación Espacial Marina es una de las políticas europeas claves para garantizar un equilibrio sostenible entre los ecosistemas y los recursos marinos. Desde su adopción, WWF ha estado trabajando con los Estados miembros para que sus planes nacionales de planificación espacial marina contengan un enfoque ecosistémico que garantice una economía azul sostenible y que haga frente a los niveles de degradación ambiental de nuestros mares.
De ese estudio, WWF ha realizado un informe donde se analizan los planes de Francia, Malta, Eslovenia y España. Mientras, cuatro Estados miembros, Croacia, Chipre, Grecia e Italia, no pudieron ser evaluados porque aún no han publicado los planes de acción para sus zonas marinas y están sujetos a procedimientos de infracción por parte de la Comisión Europea por no haber elaborado dichos planes antes de la fecha límite legal fijada para marzo de 2021. Si se hubieran incluido en el análisis los planes inacabados (cuatro de ocho) y se les hubiera dado una puntuación del 0% por no estar aplicados, la puntuación media regional para un enfoque ecosistémico de la planificación marina caería en picado del 45% al 22%.
De los Estados miembros que WWF pudo evaluar, el país con mejores resultados en la evaluación, Eslovenia, solo obtuvo un éxito parcial (56 %) en la aplicación de un enfoque ecosistémico a la gestión de sus aguas. Como dato positivo, tanto Francia como España, cuentan con estrategias específicas para ayudar a cumplir el objetivo de la Estrategia de Biodiversidad de la UE de proteger al menos el 30 % de las zonas marinas y costeras, además de medidas de mitigación que restauren importantes ecosistemas marinos, como por ejemplo las praderas de posidonia . Sin embargo, aparte de Eslovenia y Malta, todos los Estados miembros del Mediterráneo Central y Oriental siguen sin contar con una planificación espacial marina, a pesar de la gran dependencia de estas naciones del turismo marítimo.
Óscar Esparza, especialista en áreas marinas protegidas de WWF España: “para asegurar la conservación de los ecosistemas mediterráneos y promover la sostenibilidad de los recursos marinos, es crucial poner en marcha cuanto antes los planes de acción espacial marina pendientes en aquellos estados donde aún no han sido publicados. Estos planes deben estar coordinados entre países, incluyendo a aquellos fuera de la comunidad europea, y deben prestar especial atención a la protección y restauración efectiva de la naturaleza”.