El Tribunal de Cuentas Europeo (TCE) solicita que el nuevo Fondo de Transición Justa, de 19.300 millones de euros, se utilice de manera eficaz y eficiente para mitigar el impacto socioeconómico en las regiones carboníferas de la transición de la UE hacia la neutralidad climática. Un reciente informe del TCE concluye que el apoyo de la UE a estas regiones ha prestado "escasa atención" a la creación de empleo y a la transición energética. Los auditores han advertido en su informe, de que a pesar de haberse reducido considerablemente las emisiones de CO2 procedentes de la combustión del carbón, la producción nacional ha sido sustituida, en ocasiones, por las importaciones u otros combustibles fósiles. La auditoría señala que la combustión de carbón siguió siendo el origen del 15 % de las emisiones de gases de efecto invernadero de la UE en 2019.
El carbón continúa
El informe señala que, Alemania y Polonia, por ejemplo, han aumentado significativamente sus importaciones de carbón en los últimos 15 años. Como consecuencia de ello, el carbón sigue siendo una fuente importante de emisiones de gases de efecto invernadero, especialmente en Polonia, República Checa, Bulgaria, Alemania, Eslovenia y Rumanía.
El Tribunal de Cuentas Europeo lamenta que la notificación de las emisiones de metano de las minas cerradas o abandonadas no haya sido "suficientemente fiable", por lo que solicitan que el Ejecutivo comunitario comparta ejemplos de buenas prácticas para monitorizar estos valores.
Siete regiones a examen
Los auditores no observaron ningún impacto significativo en la capacidad de producción de energías renovables en las regiones que examinaron, ya que las inversiones en ahorro energético financiadas por la Unión Europea también tuvieron un impacto modesto o no pudieron cuantificarse.
Esta auditoría contenía una muestra de un total de siete regiones de Alemania, Polonia, República Checa, Bulgaria, Eslovenia y Rumanía y abarcaba más de 12.500 millones de euros de fondos de la UE concedidos en el marco financiero 2014-2020 en la segunda mitad de 2021.
Las conclusiones de este informe, recomiendan a la Comisión Europea que compruebe que el Fondo de Transición Justa se emplea de forma eficaz y eficiente para mitigar el impacto socioeconómico de la transición a la neutralidad climática en las regiones intensivas en carbón y en carbono.
Falta de análisis
Los responsables de la auditoría critican a la Comisión Europea por no haber realizado un análisis adecuado de los logros de la financiación previa de la UE en estas regiones, ni de sus otras necesidades, antes de proponer el Fondo de Transición Justa, dotado con 19.300 millones de euros, para estos sectores.
La financiación pueda gastarse sin que tenga lugar la transición, insisten los auditores, un riesgo, advierten, acentuado por el plazo limitado del programa, ya que la mayor parte de los fondos deben comprometerse antes del final de 2023 y utilizarse antes del final de 2026.
La guerra de Ucrania y sus efectos en el mercado energético, no hacen sino agravar la situación, y provocar aún más retrasos en la transición hacia el abandono del carbón. Por ello, Nikolaos Milionis, miembro del Tribunal responsable de la auditoría, ha insistido en que la Comisión Europea debe asegurarse de que el dinero de la UE apoye una vía clara para la transición hacia el abandono del carbón, teniendo en cuenta las tensiones en el mercado de la energía tras la invasión rusa de Ucrania.
TCE. Informe Ayudas de la UE a las regiones carboníferas. Página 34
«Un informe de la Comisión Europea de 2020 evaluó el potencial de las antiguas regiones carboníferas a escala NUTS 2 para invertir en fuentes de energía renovables y crear puestos de trabajo con estas tecnologías de energía limpia (...). Brandemburgo (Lausitz), Asturias y Castilla y León (Palencia y León) son regiones con un alto potencial de empleo derivado del despliegue de tecnologías energéticas limpias»
TCE. Conclusiones y recomendaciones (página 42 del informe)
«Hemos comprobado que el número de puestos de trabajo creados directamente en estas regiones gracias a las inversiones del Fondo Europeo de Desarrollo Regional era relativamente bajo. Constatamos que, en la mayoría de las regiones de nuestra muestra, los proyectos financiados no tuvieron un impacto significativo en el ahorro de energía o en la capacidad de producción de energía renovable»
Puedes acceder aquí al Informe Especial 22/2022: Ayudas de la UE a las regiones carboníferas, cuyo subtítulo es Se ha prestado poca atención a la transición socioeconómica y energética